Isaías 25:6 - Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ En Jerusalén, el Señor de los Ejércitos Celestiales preparará un maravilloso banquete para toda la gente del mundo. Será un banquete delicioso con vino añejo y carne de primera calidad.

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Biblia Reina Valera 1960

⁶ Y Jehová de los ejércitos hará en este monte a todos los pueblos banquete de manjares suculentos, banquete de vinos refinados, de gruesos tuétanos y de vinos purificados.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Yavé de los Ejércitos está preparando para todos los pueblos, en este cerro, una comida con jugosos asados y buenos vinos, un banquete de carne y vinos escogidos.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ En este monte YHVH Sebaot ofrecerá a todos los pueblos, Su banquete de manjares suculentos, Su banquete de vinos generosos, De manjares tiernos de mucho meollo, Y de vinos añejos, bien clarificados.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Yahveh Sebaot dará para todos los pueblos en este monte un banquete de manjares suculentos, un festín de vinos generosos: manjares sabrosos, enjundiosos; vinos exquisitos, depurados.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁶ Y en esta montaña Jehová de los ejércitos hará a todos los pueblos un banquete de grosuras, banquete de vinos añejos, de gruesos tuétanos, y de vinos añejos bien refinados.

Isaías 25:6 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Mateo 8:11

Y les digo que muchos gentiles vendrán de todas partes del mundo —del oriente y del occidente— y se sentarán con Abraham, Isaac y Jacob en la fiesta del reino del cielo.

Salmos 63:5

Tú me satisfaces más que un suculento banquete; te alabaré con cánticos de alegría.

Apocalipsis 19:9

Y el ángel me dijo: «Escribe esto: “Benditos son los que están invitados a la cena de la boda del Cordero”». Y añadió: «Estas son palabras verdaderas que provienen de Dios».

Lucas 22:30

de comer y beber a mi mesa en mi reino, y se sentarán sobre tronos y juzgarán a las doce tribus de Israel.

Hebreos 12:22

En cambio, ustedes han llegado al monte Sion, a la ciudad del Dios viviente, a la Jerusalén celestial, y a incontables miles de ángeles que se han reunido llenos de gozo.

Zacarías 8:3

»Ahora dice el Señor: regresaré al monte Sion y viviré en Jerusalén. Entonces Jerusalén se llamará la Ciudad Fiel; el monte del Señor de los Ejércitos Celestiales se llamará Monte Santo.

Isaías 1:19

Si tan solo me obedecen, tendrán comida en abundancia.

Mateo 26:29

Acuérdense de lo que les digo: no volveré a beber vino hasta el día en que lo beba nuevo con ustedes en el reino de mi Padre».

Isaías 25:10

Pues la mano de bendición del Señor descansará sobre Jerusalén. Moab, en cambio, será aplastado; será como la paja pisoteada y abandonada para que se pudra.

Salmos 78:68

En cambio, eligió a la tribu de Judá, y al monte Sion, al cual amaba.

Daniel 7:14

Se le dio autoridad, honra y soberanía sobre todas las naciones del mundo, para que lo obedecieran los de toda raza, nación y lengua. Su gobierno es eterno, no tendrá fin. Su reino jamás será destruido.

Cantares 5:1

¡He entrado en mi jardín, tesoro mío, esposa mía! Recojo mirra entre mis especias, y disfruto del panal con mi miel y bebo vino con mi leche. Oh amante y amada: ¡coman y beban! ¡Sí, beban su amor hasta saciarse!

Cantares 1:4

¡Llévame contigo, ven, corramos! El rey me ha traído a su alcoba. Cuánto nos alegramos por ti, oh rey; elogiamos tu amor aún más que el vino. Con razón te quieren las jóvenes.

Cantares 1:2

Bésame, una y otra vez, porque tu amor es más dulce que el vino.

Lucas 5:39

Ni nadie que prueba el vino añejo parece querer el vino nuevo. Pues dicen: “El añejo es mejor”».

Jeremías 48:11

»Desde sus comienzos, Moab ha vivido en paz; nunca ha ido al destierro. Es como el vino que se ha dejado reposar. No ha sido vertida de botella en botella, por eso es fragante y suave.

Marcos 16:15

Entonces les dijo: «Vayan por todo el mundo y prediquen la Buena Noticia a todos.

Salmos 36:8

Los alimentas con la abundancia de tu propia casa y les permites beber del río de tus delicias.

Isaías 56:7

Los llevaré a mi monte santo de Jerusalén y los llenaré de alegría en mi casa de oración. Aceptaré sus ofrendas quemadas y sus sacrificios, porque mi templo será llamado casa de oración para todas las naciones.