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Isaías 17:9 - Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Sus ciudades más grandes quedarán como bosques desiertos, como la tierra que abandonaron los heveos y los amorreos cuando llegaron los israelitas, hace ya mucho tiempo. Estarán totalmente desoladas.

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Biblia Reina Valera 1960

9 En aquel día sus ciudades fortificadas serán como los frutos que quedan en los renuevos y en las ramas, los cuales fueron dejados a causa de los hijos de Israel; y habrá desolación.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 En ese día tus ciudades fortificadas serán abandonadas como lo fueron las de los amorreos y de los jeveos ante el ataque de los hijos de Israel: quedarán despobladas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Aquel día sus plazas fuertes serán como ruinas abandonadas° ante los hijos de Israel, Y quedarán desiertas,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Aquel día serán abandonadas tus ciudades, como las abandonadas por jiveos y amorreos ante los hijos de Israel, y serán un desierto.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 En aquel día las ciudades fortificadas serán como los frutos que quedan en los renuevos y en las ramas, las cuales fueron dejadas a causa de los hijos de Israel; y habrá desolación.

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Isaías 17:9
16 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Las ciudades fortificadas quedarán en silencio y vacías; las casas estarán abandonadas, y las calles, cubiertas de mala hierba. Allí pastarán los terneros, masticando ramas y tallos.


Sin embargo, la tierra se volverá vacía y desolada a causa de la perversidad de los que la habitan.


¡Tú respetas solo las leyes del malvado rey Omri; sigues solo el ejemplo del perverso rey Acab! Por lo tanto, haré de ti un ejemplo, llevándote a la ruina. Serás tratado con desprecio, ridiculizado por todos los que te vean».


Derribaré tus muros y demoleré tus defensas.


Los altares paganos de sus antepasados quedarán en ruinas y los santuarios de Israel serán destruidos; acabaré de forma repentina con la dinastía del rey Jeroboam.


Ahora los terrores de la guerra se levantarán entre su gente. Todas sus fortificaciones caerán, tal como Salmán destruyó a Bet-arbel. Allí, a las madres y a los niños los estrellaron contra el suelo hasta matarlos.


Ya no buscarán ayuda de sus ídolos ni rendirán culto a lo que hicieron con sus propias manos. Nunca más se inclinarán ante los postes dedicados a la diosa Asera ni rendirán culto en los santuarios paganos que construyeron.


¿Por qué? Porque te has apartado del Dios que puede salvarte. Te has olvidado de la Roca que puede esconderte. Así que tal vez plantes las mejores vides e importes los tallos más costosos.


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