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Hechos 5:14 - Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Sin embargo, cada vez más personas —multitudes de hombres y mujeres— creían y se acercaban al Señor.

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Biblia Reina Valera 1960

14 Y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres;

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Más aún, cantidad de hombres y mujeres llegaban a creer en el Señor, aumentando así su número.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Y muchos más creyentes en el Señor eran añadidos: multitudes de hombres y de mujeres.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Cada día se agregaban nuevos creyentes en el Señor, multitud de hombres y de mujeres,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

14 Y más creyentes se añadían al Señor, multitudes, así de hombres como de mujeres;

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Hechos 5:14
24 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

todo el tiempo alabando a Dios y disfrutando de la buena voluntad de toda la gente. Y cada día el Señor agregaba a esa comunidad cristiana los que iban siendo salvos.


Ya no hay judío ni gentil, esclavo ni libre, hombre ni mujer, porque todos ustedes son uno en Cristo Jesús.


Perseguí a los seguidores del Camino, acosando a algunos hasta la muerte, y arresté tanto a hombres como a mujeres para arrojarlos en la cárcel.


Las noticias corrieron por toda la ciudad y muchos creyeron en el Señor;


Entonces todos los habitantes de Lida y Sarón vieron a Eneas caminando, y se convirtieron al Señor.


La iglesia, entonces, tuvo paz por toda Judea, Galilea y Samaria; se fortalecía y los creyentes vivían en el temor del Señor. Y, con la ayuda del Espíritu Santo, también creció en número.


Le pidió cartas dirigidas a las sinagogas de Damasco para solicitarles su cooperación en el arresto de los seguidores del Camino que se encontraran ahí. Su intención era llevarlos —a hombres y mujeres por igual— de regreso a Jerusalén encadenados.


Pero ahora la gente creyó el mensaje de Felipe sobre la Buena Noticia acerca del reino de Dios y del nombre de Jesucristo. Como resultado, se bautizaron muchos hombres y mujeres.


Y Saulo iba por todas partes con la intención de acabar con la iglesia. Iba de casa en casa y sacaba a rastras tanto a hombres como a mujeres y los metía en la cárcel.


Así que el mensaje de Dios siguió extendiéndose. El número de creyentes aumentó en gran manera en Jerusalén, y muchos de los sacerdotes judíos también se convirtieron.


Pero muchos de los que habían oído el mensaje lo creyeron, así que el número de hombres creyentes ascendió a un total aproximado de cinco mil.


Los que creyeron lo que Pedro dijo fueron bautizados y sumados a la iglesia en ese mismo día, como tres mil en total.


La gente declarará: «El Señor es la fuente de mi justicia y de mi fortaleza». Y todos los que estaban enojados con él se le acercarán y quedarán avergonzados.


Así que el 8 de octubre el sacerdote Esdras llevó el libro de la ley ante la asamblea, que incluía a los hombres y a las mujeres y a todos los niños con edad suficiente para entender.


Mientras Esdras oraba y hacía esa confesión llorando y postrado rostro en tierra delante del templo de Dios, una gran multitud de Israel —hombres, mujeres y niños— se congregó y lloró amargamente con él.


Después repartió a todos los israelitas que estaban allí reunidos, tanto hombres como mujeres, una hogaza de pan, un pastel de dátiles y un pastel de pasas de uva. Luego todos regresaron a su casa.


Vinieron todos los que tenían el corazón dispuesto, tanto hombres como mujeres, y trajeron al Señor sus ofrendas de oro: broches, aretes, anillos y collares. Presentaron toda clase de objetos de oro como una ofrenda especial para el Señor.


Bernabé era un hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y firme en la fe. Y mucha gente llegó al Señor.


¿Qué armonía puede haber entre Cristo y el diablo? ¿Cómo puede un creyente asociarse con un incrédulo?


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