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Hechos 2:35 - Biblia Nueva Traducción Viviente

35 hasta que humille a tus enemigos y los ponga por debajo de tus pies’”.

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Biblia Reina Valera 1960

35 Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

35 hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies.

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La Biblia Textual 3a Edicion

35 Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

35 hasta que ponga a tus enemigos por plataforma de tus pies.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

35 hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.

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Hechos 2:35
18 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Después vi a la bestia y a los reyes del mundo y sus ejércitos, todos reunidos para luchar contra el que está sentado en el caballo y contra su ejército.


El Dios de paz pronto aplastará a Satanás bajo los pies de ustedes. Que la gracia de nuestro Señor Jesús sea con ustedes.


Los descendientes de los que te atormentaron vendrán a inclinarse ante ti. Los que te despreciaron te besarán los pies. Te llamarán la Ciudad del Señor, y Sion del Santo de Israel.


Él pagará a sus enemigos por sus malas obras, y su furia caerá sobre sus adversarios; les dará su merecido hasta los confines de la tierra.


Los nómadas del desierto se inclinarán ante él; sus enemigos caerán a sus pies sobre el polvo.


En cuanto a esos enemigos míos que no querían que yo fuera su rey, tráiganlos y ejecútenlos aquí mismo en mi presencia”».


Reyes y reinas te servirán y atenderán a todas tus necesidades. Se inclinarán hasta el suelo ante ti y lamerán el polvo de tus pies. Entonces sabrás que yo soy el Señor. Los que confían en mí nunca serán avergonzados».


Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».


El Señor le dijo a mi Señor: «Siéntate en el lugar de honor a mi derecha, hasta que humille a tus enemigos y los ponga por debajo de tus pies».


Pues David nunca ascendió al cielo; sin embargo, dijo: “El Señor le dijo a mi Señor: ‘Siéntate en el lugar de honor a mi derecha,


»Por lo tanto, que todos en Israel sepan sin lugar a dudas, que a este Jesús, a quien ustedes crucificaron, ¡Dios lo ha hecho tanto Señor como Mesías!».


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