Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Hebreos 8:12 - Biblia Nueva Traducción Viviente

12 Perdonaré sus maldades y nunca más me acordaré de sus pecados».

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

12 Porque seré propicio a sus injusticias, Y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Yo perdonaré sus maldades y no volveré a acordarme de sus pecados.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

12 Porque seré propicio a sus iniquidades, Y nunca jamás me acordaré de sus pecados.°

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 cuando perdone su culpa y no recuerde más su pecado.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 Porque seré propicio a sus injusticias, y de sus pecados y de sus iniquidades no me acordaré más.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Hebreos 8:12
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Y mi pacto con ellos es que quitaré sus pecados».


»Yo, sí, yo solo, borraré tus pecados por amor a mí mismo y nunca volveré a pensar en ellos.


Volverás a tener compasión de nosotros. ¡Aplastarás nuestros pecados bajo tus pies y los arrojarás a las profundidades del océano!


En esos días —dice el Señor—, no se encontrará pecado en Israel ni en Judá, porque perdonaré al remanente que yo guarde.


Los limpiaré de sus pecados contra mí y perdonaré todos sus pecados de rebelión.


He disipado tus pecados como una nube y tus ofensas como la niebla de la mañana. Vuelve a mí, porque yo pagué el precio para ponerte en libertad».


quien compró nuestra libertad y perdonó nuestros pecados.


Dios es tan rico en gracia y bondad que compró nuestra libertad con la sangre de su Hijo y perdonó nuestros pecados.


y de Jesucristo. Él es el testigo fiel de estas cosas, el primero en resucitar de los muertos y el gobernante de todos los reyes del mundo. Toda la gloria sea al que nos ama y nos ha libertado de nuestros pecados al derramar su sangre por nosotros.


No te acuerdes de los pecados de rebeldía durante mi juventud. Acuérdate de mí a la luz de tu amor inagotable, porque tú eres misericordioso, oh Señor.


Aunque nuestros pecados nos abruman, tú los perdonas todos.


Y no habrá necesidad de enseñar a sus vecinos ni habrá necesidad de enseñar a sus parientes diciendo: “Deberías conocer al Señor”. Pues todos ya me conocerán, desde el más pequeño hasta el más grande —dice el Señor—. Perdonaré sus maldades y nunca más me acordaré de sus pecados».


¿Dónde hay otro Dios como tú, que perdona la culpa del remanente y pasa por alto los pecados de su preciado pueblo? No seguirás enojado con tu pueblo para siempre, porque tú te deleitas en mostrar tu amor inagotable.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម