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Hebreos 2:6 - Biblia Nueva Traducción Viviente

6 porque en cierto lugar las Escrituras dicen: «¿Qué son los simples mortales para que pienses en ellos, o un hijo de hombre para que de él te ocupes?

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Biblia Reina Valera 1960

6 pero alguien testificó en cierto lugar, diciendo: ¿Qué es el hombre, para que te acuerdes de él, O el hijo del hombre, para que le visites?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Alguien dijo en algún lugar: ¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él, el Hijo del hombre para que lo tomes en cuenta?

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Pero alguien declaró solemnemente en algún lugar, diciendo: ¿Qué es el hombre, para que tengas memoria de él, Y el hijo del hombre, para que lo visites?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 De esto hay un testimonio que dice: ¿Qué es el hombre, para que de él te acuerdes; o el hijo de hombre, para que de él te preocupes?

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 pero alguien testificó en cierto lugar, diciendo: ¿Qué es el hombre, para que de él te acuerdes, o el hijo del hombre, para que lo visites?

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Hebreos 2:6
16 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Oh Señor, ¿qué son los seres humanos para que te fijes en ellos, los simples mortales para que te preocupes por ellos?


«Yo, sí, yo soy quien te consuela. Entonces, ¿por qué les temes a simples seres humanos que se marchitan como la hierba y desaparecen?


Comparadas con él, las personas son gusanos; nosotros los mortales somos simples lombrices».


¿Acaso puede algún mortal ser puro? ¿Puede alguien nacido de mujer ser justo?


Sabemos que está preparado debido al pasaje en las Escrituras que menciona el séptimo día: «Cuando llegó el séptimo día, Dios descansó de toda su labor».


Se preguntaban a qué tiempo y en qué circunstancias se refería el Espíritu de Cristo, que estaba en ellos, cuando les dijo de antemano sobre los sufrimientos de Cristo y de la inmensa gloria que después vendría.


Un gran temor se apoderó de la multitud, y alababan a Dios diciendo: «Un profeta poderoso se ha levantado entre nosotros» y «Dios ha visitado hoy a su pueblo».


José les dijo a sus hermanos: «Yo pronto moriré pero ciertamente Dios los ayudará y los sacará de esta tierra de Egipto. Él los hará volver a la tierra que solemnemente prometió dar a Abraham, a Isaac y a Jacob».


Y en otro pasaje Dios le dijo: «Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec».


Gracias a la tierna misericordia de Dios, la luz matinal del cielo está a punto de brillar entre nosotros,


«Alaben al Señor, el Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo.


Las naciones del mundo no valen nada para él. Ante sus ojos, cuentan menos que nada; son solo vacío y espuma.


Nunca hagan daño ni engañen a otro creyente en este asunto, teniendo relaciones sexuales con su esposa, porque el Señor toma venganza de todos esos pecados, como ya les hemos advertido solemnemente.


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