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Génesis 6:7 - Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Entonces el Señor dijo: «Borraré de la faz de la tierra a esta raza humana que he creado. Así es, y destruiré a todo ser viviente: a todos los seres humanos, a los animales grandes, a los animales pequeños que corren por el suelo y aun a las aves del cielo. Lamento haberlos creado».

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Biblia Reina Valera 1960

7 Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Dijo: 'Borraré de la superficie de la tierra a esta humanidad que he creado, y lo mismo haré con los animales, los reptiles y las aves, pues me pesa haberlos creado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

7 Y dijo YHVH: Borraré de sobre la faz de la tierra a los seres que he creado, desde el humano hasta la bestia, el reptil y las aves de los cielos, pues me pesa haberlos hecho.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 y dijo: 'Voy a barrer de la faz de la tierra al hombre que he creado, desde el hombre hasta los animales domésticos, y hasta los reptiles, y las aves del cielo, pues me pesa de haberlos hecho'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

7 Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra, a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves de los cielos; porque me arrepiento de haberlos hecho.

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Génesis 6:7
21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Arrasaré con personas y animales por igual; arrasaré con las aves de los cielos y con los peces del mar. Reduciré a los malvados a un montón de escombros y borraré a la humanidad de la faz de la tierra —dice el Señor—.


Pero los perversos morirán; los enemigos del Señor son como las flores del campo, desaparecerán como el humo.


El Señor ha hecho todo para sus propios propósitos, incluso al perverso para el día de la calamidad.


El temor del Señor prolonga la vida, pero los años de los perversos serán truncados.


Por eso la tierra está de luto y todos desfallecen. Hasta los animales salvajes y las aves de los cielos y los peces del mar desaparecen.


Entonces el Señor lamentó haber creado al ser humano y haberlo puesto sobre la tierra. Se le partió el corazón.


Dentro de siete días, haré que descienda la lluvia sobre la tierra; y lloverá durante cuarenta días y cuarenta noches, hasta que yo haya borrado de la tierra a todos los seres vivos que he creado».


Murieron todos los seres vivos que había sobre la tierra: las aves, los animales domésticos, los animales salvajes, los animales pequeños que corren por el suelo y todas las personas.


Al Señor le agradó el aroma del sacrificio y se dijo a sí mismo: «Nunca más volveré a maldecir la tierra por causa de los seres humanos, aun cuando todo lo que ellos piensen o imaginen se incline al mal desde su niñez. Nunca más volveré a destruir a todos los seres vivos.


»Así como el Señor se deleitaba en prosperarte y en multiplicarte, ahora el Señor se deleitará en destruirte. Serás arrancado de la tierra donde estás a punto de entrar y que vas a poseer.


Y el Señor jamás perdonará a los que piensan así. Por el contrario, su enojo y su celo arderán contra ellos. Les caerán encima todas las maldiciones escritas en este libro, y el Señor borrará sus nombres de la faz de la tierra.


«Lamento haber hecho a Saúl rey, porque no me ha sido leal y se ha negado a obedecer mi mandato». Al oírlo, Samuel se conmovió tanto que clamó al Señor durante toda la noche.


Así que el Señor se retractó de ese plan y dijo: —No lo haré.


Entonces el Señor también se retractó de ese plan. —Tampoco lo haré —dijo el Señor Soberano.


«Arrasaré con todo lo que hay sobre la faz de la tierra —dice el Señor—.


Ni su plata ni su oro los salvará en el día de la ira del Señor. Pues toda la tierra será devorada por el fuego de su celo. Él dará un final aterrador a toda la gente de la tierra.


La gente está como las ramas secas de un árbol, que se arrancan y se usan para encender el fuego debajo de las ollas para cocinar. Israel es una nación tonta y necia, porque sus habitantes se han apartado de Dios. Por lo tanto, aquel que los hizo no les tendrá lástima ni misericordia.


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