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Génesis 27:28 - Biblia Nueva Traducción Viviente

28 »Del rocío de los cielos y la riqueza de la tierra, que Dios te conceda siempre abundantes cosechas de grano y vino nuevo en cantidad.

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Biblia Reina Valera 1960

28 Dios, pues, te dé del rocío del cielo, Y de las grosuras de la tierra, Y abundancia de trigo y de mosto.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

28 Que Dios te dé el rocío del cielo y la fertilidad de la tierra, y abundancia de trigos y mostos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

28 ’Elohim pues, te dé del rocío del cielo, Y de las fertilidades de la tierra, Y abundancia de grano y mosto.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

28 ¡Que Dios te dé, pues, el rocío del cielo y la fertilidad de la tierra; abundancia de trigo y de mosto!

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

28 Dios, pues, te dé del rocío del cielo, y de las grosuras de la tierra, y abundancia de trigo y de mosto.

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Génesis 27:28
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Así que Israel vivirá a salvo; el próspero Jacob habitará protegido en una tierra de grano y vino nuevo, donde los cielos dejan caer su rocío.


Moisés dijo lo siguiente sobre las tribus de José: «Que el Señor bendiga su tierra con el precioso regalo del rocío de los cielos y el agua que está debajo de la tierra,


La armonía es tan refrescante como el rocío del monte Hermón que cae sobre las montañas de Sion. Y allí el Señor ha pronunciado su bendición, incluso la vida eterna.


Oh montes de Gilboa, que no caiga sobre ustedes lluvia ni rocío, ni haya campos fructíferos que produzcan ofrendas de grano. Pues fue allí donde se contaminó el escudo de los héroes poderosos; el escudo de Saúl ya no será ungido con aceite.


Que mi enseñanza caiga sobre ustedes como lluvia; que mi discurso se asiente como el rocío. Que mis palabras caigan como lluvia sobre pastos suaves, como llovizna delicada sobre plantas tiernas.


Te amará y te bendecirá y te dará muchos hijos. Hará fértil a tu tierra y a tus animales. Cuando llegues a la tierra que juró dar a tus antepasados, tendrás numerosas cosechas de granos, vino nuevo y aceite de oliva, y también grandes manadas de ganado, ovejas y cabras.


Pues estoy plantando semillas de paz y prosperidad entre ustedes. Las vides estarán cargadas de fruta, la tierra producirá sus cosechas y los cielos soltarán el rocío. Una vez más yo haré que el remanente de Judá y de Israel herede estas bendiciones.


El Señor responderá: «¡Miren!, les envío grano, vino nuevo y aceite de oliva, suficiente para satisfacer sus necesidades. Ya no serán objeto de burla entre las naciones vecinas.


»Ábranse, oh cielos, y derramen su justicia. Que la tierra se abra de par en par, para que broten juntas la salvación y la justicia. Yo, el Señor, las he creado.


vino para que se alegren, aceite de oliva para aliviarles la piel, y pan para que se fortalezcan.


Los alimentas con la abundancia de tu propia casa y les permites beber del río de tus delicias.


Ahora bien, Elías, quien era de Tisbé en Galaad, le dijo al rey Acab: «Tan cierto como que el Señor vive, el Dios de Israel —a quien sirvo—, no habrá rocío ni lluvia durante los próximos años, ¡hasta que yo dé la orden!».


»También te doy las ofrendas de la cosecha que el pueblo presenta al Señor: lo mejor del aceite de oliva y del vino nuevo y del grano.


Fue por la fe que Isaac prometió a sus hijos, Jacob y Esaú, bendiciones para el futuro.


¡Qué espléndidos y hermosos serán! Los jóvenes florecerán con la abundancia de grano y las jóvenes con el vino nuevo.


Entonces el remanente que quedó en Israel ocupará su lugar entre las naciones. Será como rocío enviado por el Señor o como lluvia que cae sobre la hierba, la cual nadie puede controlar ni hacer que se detenga.


¿Puede alguno de los inútiles dioses ajenos enviarnos lluvia? ¿O acaso cae del cielo por sí misma? No, tú eres el único, ¡oh Señor nuestro Dios! Solo tú puedes hacer tales cosas. Entonces esperaremos que nos ayudes.


Para quienes corten la madera, enviaré como pago 100.000 canastas de trigo molido, 100.000 canastas de cebada, 420.000 litros de vino y 420.000 litros de aceite de oliva».


Salomón le enviaba, a cambio, un pago anual de 100.000 canastas de trigo para su casa y 420.000 litros de aceite de oliva puro.


Los israelitas anduvieron cuarenta años por el desierto hasta que murieron todos los hombres que salieron de Egipto y que tenían edad para ir a la guerra. Ellos habían desobedecido al Señor, por eso el Señor juró que no los dejaría entrar en la tierra que había prometido darnos, una tierra donde fluyen la leche y la miel.


»Aser cenará manjares deliciosos y producirá comida digna de reyes.


Luego vayan a buscar a su padre y a sus familias y vuelvan aquí. Yo les daré la mejor tierra en Egipto, y comerán de lo mejor que esa tierra produce”».


Algunas ramas del árbol de Abraham —algunos del pueblo de Israel— han sido arrancadas; y ustedes, los gentiles, que eran ramas de un olivo silvestre, fueron injertados. Así que ahora ustedes también reciben la bendición que Dios prometió a Abraham y a sus hijos, con lo cual comparten con ellos el alimento nutritivo que proviene de la raíz del olivo especial de Dios.


El terreno, ¿es fértil o estéril? ¿Abundan los árboles? Hagan todo lo posible por traer muestras de las cosechas que encuentren». (Era la temporada de la cosecha de las primeras uvas maduras).


Finalmente su padre Isaac le dijo: «Tú vivirás lejos de las riquezas de la tierra y lejos del rocío que desciende de los cielos.


—He puesto a Jacob como tu amo —dijo Isaac a Esaú—, y he declarado que todos sus hermanos serán sus siervos. Le he garantizado abundancia de grano y de vino; ¿qué me queda para darte a ti, hijo mío?


Que el Dios de tu padre te ayude; que el Todopoderoso te bendiga con bendiciones de los cielos de arriba, y con bendiciones de las aguas profundas de abajo, y con bendiciones de los pechos y del vientre.


Con su conocimiento se abrieron las fuentes profundas de la tierra e hizo que el rocío se asiente bajo el cielo nocturno.


El enojo del rey es como el rugido del león, pero su favor es como el rocío sobre el pasto.


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