Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Ezequiel 39:25 - Biblia Nueva Traducción Viviente

25 »Ahora bien, esto dice el Señor Soberano: pondré fin a la cautividad de mi pueblo. ¡Tendré misericordia de todo Israel, pues yo protejo celosamente mi santa reputación!

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

25 Por tanto, así ha dicho Jehová el Señor: Ahora volveré la cautividad de Jacob, y tendré misericordia de toda la casa de Israel, y me mostraré celoso por mi santo nombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Por eso, esto dice Yavé: Voy a traer de vuelta a los desterrados de Jacob, tendré piedad de todo Israel y defenderé celosamente mi Santo Nombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

25 Por tanto, así dice Adonay YHVH: Ahora haré volver la cautividad de Jacob y tendré misericordia de toda la casa de Israel, y me mostraré celoso por mi santo Nombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 'Por eso, así dice el Señor Yahveh: ahora cambiaré la suerte de Jacob, tendré compasión de toda la casa de Israel y seré celoso de mi nombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

25 Por tanto, así dice el Señor Jehová: Ahora volveré la cautividad de Jacob, y tendré misericordia de toda la casa de Israel, y me mostraré celoso por mi santo nombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Ezequiel 39:25
31 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Las sacaré de entre los demás pueblos y naciones y las traeré de regreso a casa, a su propia tierra. Las alimentaré en las montañas de Israel, junto a los ríos y en todos los lugares habitados.


Entonces los pueblos de Judá e Israel se unirán, elegirán un solo líder y regresarán juntos del destierro. Qué gran día será —el día de Jezreel— cuando Dios plantará de nuevo a su pueblo en su tierra.


Pues algún día, dice el Señor Soberano, los israelitas me adorarán en mi monte santo, el gran monte de Israel, y yo los aceptaré. Allí les exigiré que me presenten todas sus ofrendas y los mejores regalos y sacrificios.


Pues se acerca la hora cuando restableceré el bienestar de mi pueblo, Israel y Judá. Los traeré a casa, a esta tierra que di a sus antepasados, y volverán a poseerla. ¡Yo, el Señor, he hablado!».


Restableceré el bienestar de Judá e Israel y reconstruiré sus ciudades.


«En ese día —dice el Señor—, seré el Dios de todas las familias de Israel, y ellas serán mi pueblo.


Esto dice el Señor: «Cuando del cautiverio traiga a Israel de regreso a casa y cuando restablezca su bienestar, Jerusalén será reedificada sobre sus ruinas y el palacio reconstruido como antes.


»Así que no temas, Jacob, mi siervo; no te dejes abatir, Israel —dice el Señor—. Pues desde tierras lejanas los traeré de regreso a casa, y sus hijos regresarán del destierro. Israel regresará a una vida de paz y tranquilidad, y nadie lo atemorizará.


Pues el Señor Soberano, que hace volver a los marginados de Israel, dice: Traeré a otros también, además de mi pueblo Israel».


«El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: mi amor por el monte Sion es intenso y ferviente, ¡me consume la pasión por Jerusalén!


Luego el ángel me dijo: «Proclama este mensaje a gritos para que todos lo oigan: “El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: ‘Mi amor por Jerusalén y el monte Sion es intenso y ferviente.


Traeré a mi pueblo Israel de su cautiverio en tierras lejanas; reedificarán sus ciudades que están en ruinas y nuevamente vivirán en ellas. Plantarán viñedos y huertos; comerán sus cosechas y beberán su vino.


Entonces el Señor se compadecerá de su pueblo y guardará celosamente el honor de su tierra.


ciertamente traeré de regreso a mi pueblo de todos los países adonde lo esparcí en mi furor. Lo traeré de regreso a esta misma ciudad para que viva en paz y seguridad.


Hace tiempo el Señor le dijo a Israel: «Yo te he amado, pueblo mío, con un amor eterno. Con amor inagotable te acerqué a mí.


pero reuniré al remanente de mi rebaño de todos los países donde lo he expulsado. Volveré a traer a mis ovejas a su redil y serán fructíferas y crecerán en número.


En aquellos días la gente de Judá y la gente de Israel volverán juntas del destierro del norte. Regresarán a la tierra que les di a los antepasados de ustedes como herencia perpetua.


No te inclines ante ellos ni les rindas culto, porque yo, el Señor tu Dios, soy Dios celoso, quien no tolerará que entregues tu corazón a otros dioses. Extiendo los pecados de los padres sobre sus hijos; toda la familia de los que me rechazan queda afectada, hasta los hijos de la tercera y la cuarta generación.


¡Señor, tú derramaste bendiciones sobre tu tierra! Devolviste el bienestar a Israel.


Nunca abandonaré a los descendientes de Jacob o de mi siervo David ni cambiaré el plan de que los descendientes de David gobiernen a los descendientes de Abraham, Isaac y Jacob. En cambio, yo los restauraré a su tierra y tendré misericordia de ellos».


Aumentaré en gran manera la población de Israel y las ciudades en ruinas se reconstruirán y se llenarán de gente.


Luego me dijo: «Hijo de hombre, estos huesos representan al pueblo de Israel. Ellos dicen: “Nos hemos vuelto huesos viejos y secos; hemos perdido toda esperanza. Nuestra nación está acabada”.


»”De ese modo, daré a conocer mi santo nombre en medio de mi pueblo Israel. No permitiré que nadie deshonre mi nombre; y las naciones también sabrán que yo soy el Señor, el Santo de Israel.


El Señor es Dios celoso, lleno de ira y venganza. ¡Él toma venganza de todos los que se le oponen y persiste en su furia contra sus enemigos!


Pero el Señor tendrá misericordia de los descendientes de Jacob y una vez más elegirá a Israel como su pueblo especial. Lo hará regresar para que se establezca otra vez en su propia tierra. Y gente de varias naciones vendrá para encontrarse con ellos y unirse al pueblo de Israel.


Sí, me encontrarán —dice el Señor—. Pondré fin a su cautiverio y restableceré su bienestar. Los reuniré de las naciones adonde los envié y los llevaré a casa, de regreso a su propia tierra”.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម