Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Apocalipsis 3:19 - Biblia Nueva Traducción Viviente

19 Yo corrijo y disciplino a todos los que amo. Por lo tanto, sé diligente y arrepiéntete de tu indiferencia.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

19 Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

19 Yo reprendo y corrijo a los que amo. Vamos, anímate y conviértete.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

19 Yo reprendo y disciplino a todos los que amo,° sé pues fervoroso, y arrepiéntete.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

19 Yo, a los que amo, los reprendo y castigo. ¡Anímate, pues, y conviértete!

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

19 Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Apocalipsis 3:19
31 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Sin embargo, cuando el Señor nos juzga, nos está disciplinando para que no seamos condenados junto con el mundo.


¡Mira hasta dónde has caído! Vuélvete a mí y haz las obras que hacías al principio. Si no te arrepientes, vendré y quitaré tu candelabro de su lugar entre las iglesias;


»¡Pero considera la alegría de aquellos a quienes Dios corrige! Cuando peques, no menosprecies la disciplina del Todopoderoso.


¡Tan solo miren lo que produjo en ustedes esa tristeza que proviene de Dios! Tal fervor, tal ansiedad por limpiar su nombre, tal indignación, tal preocupación, tal deseo de verme, tal celo y tal disposición para castigar lo malo. Ustedes demostraron haber hecho todo lo necesario para corregir la situación.


Oí a Israel decir: “Me disciplinaste severamente, como a un becerro que necesita ser entrenado para el yugo. Hazme volver a ti y restáurame, porque solo tú eres el Señor mi Dios.


Así que corrígeme, Señor, pero, por favor, sé tierno; no me corrijas con enojo porque moriría.


Diles: “Esta es la nación que no obedece al Señor su Dios y que rechaza ser enseñada. Entre ellos la verdad ha desaparecido; ya no se escucha en sus labios.


Señor, en nuestra angustia te hemos buscado; bajo la carga de tu disciplina hemos orado.


El corazón del muchacho está lleno de necedad, pero la disciplina física la alejará de él.


Si rechazas la disciplina, solo te harás daño a ti mismo, pero si escuchas la corrección, crecerás en entendimiento.


El celo por tu casa me ha consumido, y los insultos de aquellos que te insultan han caído sobre mí.


Cuando nos disciplinas por nuestros pecados, consumes como una polilla lo que estimamos precioso. Cada uno de nosotros es apenas un suspiro. Interludio


Ten por cierto que, así como un padre disciplina a su hijo, el Señor tu Dios te disciplina para tu propio bien.


Dios bendice a los que soportan con paciencia las pruebas y las tentaciones, porque después de superarlas, recibirán la corona de vida que Dios ha prometido a quienes lo aman.


Él dio su vida para liberarnos de toda clase de pecado, para limpiarnos y para hacernos su pueblo, totalmente comprometidos a hacer buenas acciones.


No sean nunca perezosos, más bien trabajen con esmero y sirvan al Señor con entusiasmo.


Yo estoy contigo y te salvaré —dice el Señor—. Destruiré por completo a las naciones entre las cuales te esparcí, pero a ti no te destruiré por completo. Te disciplinaré, pero con justicia; no puedo dejarte sin castigo».


Él castiga a las naciones, ¿acaso no los castigará a ustedes? Él todo lo sabe, ¿acaso no sabe también lo que ustedes hacen?


Oh Señor, no me reprendas en tu enojo ni me disciplines en tu ira.


Yo seré su padre, y él será mi hijo. Si peca, lo corregiré y lo disciplinaré con vara, como lo haría cualquier padre.


Nos ignoran aun cuando somos bien conocidos. Vivimos al borde de la muerte, pero aún seguimos con vida. Nos han golpeado, pero no matado.


Entonces sus discípulos recordaron la profecía de las Escrituras que dice: «El celo por la casa de Dios me consumirá».


El que abandona el buen camino será severamente disciplinado; el que odia la corrección morirá.


Si alguien quiere hacer cosas buenas por ustedes, no hay ningún problema; pero que lo haga en todo tiempo, no solo cuando estoy con ustedes.


Nadie puede decirle nada; rechaza toda corrección. No confía en el Señor ni se acerca a su Dios.


He castigado a tus hijos, pero no respondieron a mi disciplina. Tú mismo mataste a tus profetas como un león mata a su presa.


»Todas las damas de honor se levantaron y prepararon sus lámparas.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម