Amós 6:10 - Biblia Nueva Traducción Viviente10 Luego, cuando el pariente responsable de deshacerse de los muertos entre en la casa para llevarse los cuerpos, le preguntará al último sobreviviente: «¿Está alguien más contigo?». Entonces, cuando la persona comience a jurar: «No, por...», la interrumpirá y dirá: «¡Cállate! Ni siquiera menciones el nombre del Señor»). សូមមើលជំពូកកំណែច្រើនទៀតBiblia Reina Valera 196010 Y un pariente tomará a cada uno, y lo quemará para sacar los huesos de casa; y dirá al que estará en los rincones de la casa: ¿Hay aún alguno contigo? Y dirá: No. Y dirá aquel: Calla, porque no podemos mencionar el nombre de Jehová. សូមមើលជំពូកBiblia Católica (Latinoamericana)10 y cuando se presenten los deudos para sacar sus huesos, si a uno, que está al fondo le preguntan: 'Oye, ¿queda alguien por allá?', សូមមើលជំពូកLa Biblia Textual 3a Edicion10 Y cuando el pariente° y el incinerador° vengan a sacar los huesos de la casa, Dirán al que está en el interior de la casa: ¿Queda alguno° más? Y contestará: No hay más…° Pero el otro lo interrumpirá: ¡Shsss!, Que no es tiempo de pronunciar el nombre de YHVH. សូមមើលជំពូកBiblia Serafín de Ausejo 197510 Entonces entrará su tío o su pariente para sacar de la casa los huesos, y dirá al que está en un rincón de la casa: '¿Hay alguno más contigo?'. Responderá: 'Ninguno'. El otro dirá: '¡Calla! Que no hay que mentar el nombre de Yahveh'. សូមមើលជំពូកBiblia Reina Valera Gómez (2023)10 Y su tío tomará a cada uno, y le quemará para sacar los huesos de casa; y dirá al que estará en los rincones de la casa: ¿Hay aún alguno contigo? Y dirá: No. Entonces dirá aquél: Calla que no podemos hacer mención del nombre de Jehová. សូមមើលជំពូក |
»Sin embargo, escuchen este mensaje del Señor todos ustedes, los judíos que ahora viven en Egipto: “He jurado por mi gran nombre —dice el Señor— que mi nombre ya no será pronunciado por ningún judío en la tierra de Egipto. Ninguno de ustedes podrá invocar mi nombre ni usar el siguiente juramento: ‘Tan cierto como que el Señor Soberano vive’.
Luego Josías se dio vuelta y notó que había varias tumbas en la ladera de la colina. Ordenó que sacaran los huesos y los quemó sobre el altar de Betel para profanarlo. (Todo sucedió tal como lo había anunciado el Señor por medio del hombre de Dios cuando Jeroboam se paró junto al altar durante el festival). Después Josías se dio vuelta y miró hacia arriba, a la tumba del hombre de Dios que había predicho estas cosas.