Abdías 1:3 - Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Has sido engañada por tu propio orgullo porque vives en una fortaleza de piedra y haces tu morada en lo alto de las montañas. “¿Quién puede tocarnos aquí en las remotas alturas?”, te preguntas con arrogancia;

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Biblia Reina Valera 1960

³ La soberbia de tu corazón te ha engañado, tú que moras en las hendiduras de las peñas, en tu altísima morada; que dices en tu corazón: ¿Quién me derribará a tierra?

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ La soberbia de tu corazón te ha engañado a ti que habitas en las quebradas de Petra, que te cuelgas de la muralla rocosa y que dices en tu corazón: '¿Quién me hará bajar a tierra?'

La Biblia Textual 3a Edicion

³ La soberbia de tu corazón te sedujo, Porque habitas en rocas° escarpadas.° En la altura de tu morada, piensas: ¿Quién me derribará por tierra?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ El orgullo de tu corazón te engañó, tú que habitas en las hendiduras de la roca, que tienes la altura por morada, que dices en tu corazón: '¿Quién será capaz de derribarme en tierra?'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³ La soberbia de tu corazón te ha engañado, tú que moras en las hendiduras de las peñas, en tu altísima morada; que dices en tu corazón: ¿Quién me derribará a tierra?

Abdías 1:3 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Jeremías 49:16

Has sido engañada por tu propio orgullo y por el temor que inspirabas en los demás. Vives en una fortaleza de piedra y controlas las alturas de las montañas. Pero aun si haces tu nido con las águilas en las cumbres, te haré caer estrepitosamente», dice el Señor.

Proverbios 29:23

El orgullo termina en humillación, mientras que la humildad trae honra.

Isaías 16:6

Hemos oído hablar del soberbio Moab, de su orgullo, de su arrogancia y de su furia; pero todo su alarde ha desaparecido.

2 Reyes 14:7

Amasías también mató a diez mil edomitas en el valle de la Sal. Además, conquistó la ciudad de Sela y le cambió el nombre a Jocteel, como se le conoce hasta el día de hoy.

Malaquías 1:4

Los descendientes de Esaú en Edom podrán decir: «Hemos sido destrozados, pero reconstruiremos las ruinas». No obstante, el Señor de los Ejércitos Celestiales responde: «Puede ser que intenten reconstruirlas, pero yo las derribaré de nuevo. Su país será conocido como “tierra de perversidad” y su pueblo será llamado “el pueblo con quien el Señor está para siempre enojado”.

Jeremías 49:4

Estás orgullosa de tus fértiles valles, hija rebelde, pero pronto se convertirán en ruinas. Confiaste en tus riquezas y pensaste que nadie podría hacerte daño.

Proverbios 18:12

La arrogancia va delante de la destrucción; la humildad precede al honor.

Proverbios 16:18

El orgullo va delante de la destrucción, y la arrogancia antes de la caída.

2 Crónicas 25:12

Capturaron a otros diez mil, los llevaron hasta el borde de un precipicio y desde allí los despeñaron. Al caer sobre las rocas abajo, se hicieron pedazos.

2 Crónicas 25:11

Luego Amasías se armó de valor y dirigió a su ejército al valle de la Sal, donde mataron a diez mil soldados edomitas de Seir.

Job 20:6

Aunque el orgullo de los incrédulos llegue hasta los cielos y toquen las nubes con la cabeza,

Jeremías 21:13

Yo pelearé personalmente contra el pueblo en Jerusalén, esa poderosa fortaleza, contra el pueblo que se jacta: ‘Nadie puede tocarnos aquí; nadie puede entrar aquí’.

Jeremías 37:9

»Esto dice el Señor: “No se engañen a sí mismos creyendo que los babilonios se marcharon para siempre. ¡No es así!

Jeremías 48:28

»Ustedes, habitantes de Moab, huyan de sus ciudades y vivan en cuevas. Escóndanse como palomas que anidan en las hendiduras de las rocas.

Génesis 36:8

Por eso, Esaú (también conocido como Edom) se estableció en la zona montañosa de Seir.

Ezequiel 28:16

Tu abundante comercio te llevó a la violencia, y pecaste. Entonces te expulsé en deshonra de la montaña de Dios. Te eché, guardián poderoso, del lugar que tenías entre las piedras de fuego.