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2 Reyes 14:10 - Biblia Nueva Traducción Viviente

10 »Es cierto que has derrotado a Edom y estás orgulloso de eso, pero ¡confórmate con tu victoria y quédate en casa! ¿Para qué causar problemas que solo te traerán calamidad a ti y al pueblo de Judá?».

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Biblia Reina Valera 1960

10 Ciertamente has derrotado a Edom, y tu corazón se ha envanecido; gloríate pues, mas quédate en tu casa. ¿Para qué te metes en un mal, para que caigas tú y Judá contigo?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

10 Venciste a Edom y estás orgulloso de ello. Muy bien, ufánate y quédate en casa. ¿Para qué vas a atraer la desgracia y la muerte sobre ti y sobre Judá?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

10 Ciertamente has vencido a Edom, y tu corazón te ha enaltecido. ¡Gloríate de eso y quédate en tu casa! ¿Por qué habrás de provocar una calamidad en la que puedas caer tú y Judá contigo?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Por haber derrotado a Edom, se ha engreído tu corazón. Disfruta de esa gloria, pero quédate en tu casa. ¿Para qué provocar una desventura, en la que vas a caer tú y Judá contigo?'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

10 Ciertamente has derrotado a Edom, y tu corazón se ha envanecido; gloríate, pues, mas quédate en tu casa. ¿Para qué te metes en un mal, para que caigas tú, y Judá contigo?

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2 Reyes 14:10
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Pero cuando llegó a ser poderoso, Uzías también se volvió orgulloso, lo cual resultó en su ruina. Pecó contra el Señor su Dios cuando entró al santuario del templo del Señor y personalmente quemó incienso sobre el altar del incienso.


No te vuelvas orgulloso en esos días y entonces te olvides del Señor tu Dios, quien te rescató de la esclavitud en la tierra de Egipto.


pero Ezequías no respondió de manera adecuada a la bondad que le había sido mostrada y se volvió orgulloso. Por eso el enojo del Señor vino contra él y contra Judá y Jerusalén.


Evitar la pelea es una señal de honor; solo los necios insisten en pelear.


El orgullo va delante de la destrucción, y la arrogancia antes de la caída.


El que pierde los estribos con facilidad provoca peleas; el que se mantiene sereno, las detiene.


No busques pelea sin motivo, cuando nadie te ha hecho daño.


Y él da gracia con generosidad. Como dicen las Escrituras: «Dios se opone a los orgullosos pero da gracia a los humildes».


Los creyentes que son pobres pueden estar orgullosos, porque Dios los ha honrado;


»¡Mira a los orgullosos! Confían en sí mismos y sus vidas están torcidas. Pero el justo vivirá por su fidelidad a Dios.


»”Esto pregunta el Señor Soberano: ¿eres tú de quien yo hablé hace mucho tiempo, cuando anuncié mediante los profetas de Israel que en el futuro te enviaría contra mi pueblo?


Además te acompañarán Persia, Etiopía y Libia con todas sus armas.


«Hijo de hombre, ponte de cara a Gog, de la tierra de Magog, el príncipe que gobierna a las naciones de Mesec y Tubal, y profetiza contra él.


Entrometerse en los pleitos ajenos es tan necio como jalarle las orejas a un perro.


no vayas corriendo a los tribunales. Pues, ¿qué harás si a fin de cuentas tu prójimo te desmiente y te hace pasar vergüenza?


Comenzar una pelea es como abrir las compuertas de una represa, así que detente antes de que estalle la disputa.


pero el rey Necao envió mensajeros a Josías con el siguiente mensaje: «¿Qué quieres de mí, rey de Judá? ¡No tengo nada contra ti! ¡Voy de camino a pelear contra otra nación, y Dios me ha dicho que me apresure! No interfieras con Dios, quien está conmigo, o él te destruirá».


Amasías también mató a diez mil edomitas en el valle de la Sal. Además, conquistó la ciudad de Sela y le cambió el nombre a Jocteel, como se le conoce hasta el día de hoy.


—¡Tú fija la hora! —respondió Moisés—. Dime cuándo quieres que ore por ti, por tus funcionarios y por tu gente. Entonces tú y tus casas se librarán de las ranas, y estas quedarán solo en el río Nilo.


La riqueza es traicionera y los arrogantes nunca están tranquilos. Abren la boca tan grande como una tumba, y como la muerte nunca están satisfechos. En su avaricia juntaron a muchas naciones y devoraron a muchos pueblos.


Entonces Abimelec los siguió para atacar la torre; pero cuando se preparaba para prenderle fuego a la entrada,


Sí, tu sabiduría te hizo muy rico, y tus riquezas, muy orgulloso.


Después de arrasar con el ejército enemigo, el rey del sur se llenará de orgullo y ejecutará a muchos miles de sus enemigos; pero su triunfo no durará mucho tiempo.


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