Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





2 Crónicas 12:2 - Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Debido a que fueron infieles al Señor, el rey Sisac de Egipto subió y atacó Jerusalén en el quinto año del reinado de Roboam.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

2 Y por cuanto se habían rebelado contra Jehová, en el quinto año del rey Roboam subió Sisac rey de Egipto contra Jerusalén,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Y sucedió que el año quinto del rey Roboam subió Sosaq, rey de Egipto, contra Jerusalén, pues sus habitantes no eran fieles a Yavé;'

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Y por cuanto se habían rebelado contra YHVH, en el año quinto del rey Roboam, sucedió que Sisac rey de Egipto subió contra Jerusalem

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Por eso, en el año quinto del rey Roboán subió Sosac, rey de Egipto, contra Jerusalén -por haber prevaricado contra Yahveh-,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Y sucedió que en el quinto año del rey Roboam subió Sisac, rey de Egipto, contra Jerusalén (por cuanto se habían rebelado contra Jehová),

សូមមើលជំពូក ចម្លង




2 Crónicas 12:2
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Salomón intentó matar a Jeroboam, pero él huyó a Egipto, donde reinaba Sisac, y se quedó allí hasta la muerte de Salomón.


La alegría abandonó nuestro corazón; nuestras danzas se convirtieron en luto.


Tu perversidad traerá su propio castigo. El haberte alejado de mí te avergonzará. Verás qué malo y amargo es abandonar al Señor tu Dios y no temerle. ¡Yo, el Señor, el Señor de los Ejércitos Celestiales, he hablado!


Pero ellos se rebelaron contra él y entristecieron a su Santo Espíritu. Así que él se convirtió en enemigo de ellos y peleó contra ellos.


»Y tú, Salomón, hijo mío, aprende a conocer íntimamente al Dios de tus antepasados. Adóralo y sírvelo de todo corazón y con una mente dispuesta. Pues el Señor ve cada corazón y conoce todo plan y pensamiento. Si lo buscas, lo encontrarás; pero si te apartas de él, te rechazará para siempre.


Pues el Señor había hecho que el ejército arameo escuchara el traqueteo de carros de guerra a toda velocidad, el galope de caballos y los sonidos de un gran ejército que se acercaba. Por eso se gritaron unos a otros: «¡El rey de Israel ha contratado a los hititas y a los egipcios para que nos ataquen!».


Cierta vez un etíope llamado Zera atacó a Judá con un ejército de un millón de soldados y trescientos carros de guerra. Avanzaron hacia la ciudad de Maresa,


que envía embajadores río abajo en rápidos barcos. ¡Vayan, veloces mensajeros! Llévenle un mensaje a un pueblo de gente alta con piel suave, temido en todas partes por sus conquistas y destrucción, y cuya tierra está dividida por ríos.


El rey Asa tenía un ejército de trescientos mil guerreros de la tribu de Judá, armados con grandes escudos y lanzas. También tenía un ejército de doscientos ochenta mil guerreros de la tribu de Benjamín, armados con arcos y escudos pequeños. Ambos ejércitos estaban constituidos por hombres de guerra bien entrenados.


¡Decidieron abandonar el templo del Señor, Dios de sus antepasados y, en cambio, rindieron culto a ídolos y a los postes dedicados a la diosa Asera! A causa de este pecado, el enojo divino cayó sobre Judá y Jerusalén.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម