1 Reyes 20:38 - Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁸ El profeta se puso una venda en los ojos para que no lo reconocieran y se quedó junto al camino, esperando al rey.

កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

³⁸ Y el profeta se fue, y se puso delante del rey en el camino, y se disfrazó, poniéndose una venda sobre los ojos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁸ Entonces el hermano profeta fue a ponerse por donde debía pasar el rey; se había disfrazado con un pañuelo en los ojos.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁸ Y el profeta fue y se puso delante del rey en el camino, y se disfrazó, poniéndose una venda sobre los ojos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁸ Luego el profeta se fue y se puso a esperar al rey en el camino, disfrazado con una venda en los ojos.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁸ Y el profeta se fue, y se puso delante del rey en el camino, y se disfrazó poniendo ceniza sobre su rostro.

1 Reyes 20:38 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

1 Reyes 14:2

Por eso Jeroboam le dijo a su esposa: «Disfrázate para que nadie se dé cuenta de que eres mi esposa y ve a ver al profeta Ahías en Silo, el hombre que me dijo que yo sería rey.

Mateo 6:16

»Cuando ayunes, que no sea evidente, porque así hacen los hipócritas; pues tratan de tener una apariencia miserable y andan desarreglados para que la gente los admire por sus ayunos. Les digo la verdad, no recibirán otra recompensa más que esa.

1 Reyes 22:30

El rey de Israel dijo a Josafat: «Cuando entremos en la batalla, yo me disfrazaré para que nadie me reconozca, pero tú ponte tus vestiduras reales». Así que el rey de Israel se disfrazó, y ambos entraron en la batalla.

2 Samuel 14:2

Así que mandó llamar a una mujer de Tecoa que tenía fama de ser muy sabia. Le dijo: «Finge que estás de duelo; ponte ropa de luto y no uses lociones. Actúa como una mujer que ha estado de duelo por mucho tiempo.

1 Reyes 20:37

Luego el profeta se dirigió a otro hombre y le dijo: «¡Golpéame!». Así que el hombre lo golpeó y lo hirió.

1 Reyes 20:41

Enseguida el profeta se quitó la venda de los ojos, y el rey lo reconoció como uno de los profetas.