Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





1 Reyes 12:13 - Biblia Nueva Traducción Viviente

13 Entonces Roboam habló con dureza al pueblo porque rechazó el consejo de los ancianos

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

13 Y el rey respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían dado;

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

13 El rey habló al pueblo ásperamente; no tuvo en cuenta el consejo de los ancianos,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

13 Entonces el rey respondió al pueblo de mal talante, y dejó de lado el consejo que le habían dado los ancianos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 El rey respondió al pueblo con dureza, desechando el consejo que le habían dado los ancianos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

13 Y el rey respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían dado;

សូមមើលជំពូក ចម្លង




1 Reyes 12:13
21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Sin embargo, la sabiduría que proviene del cielo es, ante todo, pura y también ama la paz; siempre es amable y dispuesta a ceder ante los demás. Está llena de compasión y del fruto de buenas acciones. No muestra favoritismo y siempre es sincera.


Las palabras sabias traen aprobación, pero a los necios, sus propias palabras los destruyen.


El pobre ruega misericordia; el rico responde con insultos.


Camina con sabios y te harás sabio; júntate con necios y te meterás en dificultades.


Los labios del justo hablan palabras provechosas, pero la boca del malvado habla perversidad.


Las palabras de los justos son como una fuente que da vida; las palabras de los perversos encubren intenciones violentas.


—Pero hay diez tribus en Israel —respondieron los otros—. De modo que tenemos diez veces más derecho sobre el rey que ustedes. ¿Qué derecho tienen de tratarnos con tanto desprecio? ¿Acaso no fuimos nosotros los primeros en hablar de traerlo de regreso para que fuera de nuevo nuestro rey? La discusión continuó entre unos y otros, y los hombres de Judá hablaron con más dureza que los de Israel.


Entonces David le preguntó: —¿Cómo podré saber si tu padre está enojado o no?


—¡Lárgate de aquí! —le gritó el faraón a Moisés—. Te advierto: ¡jamás regreses a verme! El día que me veas la cara, ¡morirás!


—¿Ah sí? —replicó el faraón—. ¿Y quién es ese Señor? ¿Por qué tendría que escucharlo y dejar ir a Israel? Yo no conozco a ese tal Señor y no dejaré que Israel se vaya.


«El hombre que gobierna la nación nos habló con mucha dureza —le dijeron—. Nos acusó de ser espías en su tierra,


José reconoció a sus hermanos enseguida, pero fingió no conocerlos y les habló con dureza. —Ustedes, ¿de dónde vienen? —les preguntó. —De la tierra de Canaán —contestaron—. Venimos a comprar alimento.


Abram respondió: —Mira, ella es tu sierva, así que haz con ella como mejor te parezca. Entonces Sarai comenzó a tratar a Agar con tanta dureza que al final ella huyó.


La respuesta apacible desvía el enojo, pero las palabras ásperas encienden los ánimos.


Tres días después, Jeroboam y toda la gente regresaron para conocer la decisión de Roboam, tal como el rey había ordenado.


y siguió el consejo de los más jóvenes. Así que le dijo al pueblo: «Mi padre les impuso cargas pesadas, ¡pero yo las haré aún más pesadas! Mi padre los golpeaba con látigos, ¡pero yo los azotaré con escorpiones!».


¿Y quién sabe si mis sucesores serán sabios o necios? Sin embargo, ellos se van a apoderar de todo lo que yo he adquirido bajo el sol a través de mi destreza y esfuerzo. ¡Qué absurdo!


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម