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1 Reyes 1:29 - Biblia Nueva Traducción Viviente

29 y el rey repitió su juramento: —Tan cierto como que el Señor vive y me ha rescatado de todo peligro,

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Biblia Reina Valera 1960

29 Y el rey juró diciendo: Vive Jehová, que ha redimido mi alma de toda angustia,

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Biblia Católica (Latinoamericana)

29 El rey hizo este juramento: 'Te juro por la vida de Yavé, que me libró de todas mis dificultades, que hoy mismo voy a ratificar el juramento que hice por Yavé, Dios de Israel.

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La Biblia Textual 3a Edicion

29 Y el rey juró y dijo: ¡Vive YHVH, que rescató mi alma de toda angustia,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

29 Entonces el rey pronunció este juramento: '¡Por vida de Yahveh, que me ha liberado de todas las angustias,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

29 Y el rey juró, diciendo: Vive Jehová, que ha redimido mi alma de toda angustia,

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1 Reyes 1:29
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Pero David les dijo a Recab y a Baana: —El Señor, quien me salva de todos mis enemigos, es mi testigo.


Nos salvó de nuestros enemigos. Su fiel amor perdura para siempre.


Aunque estoy rodeado de dificultades, tú me protegerás del enojo de mis enemigos. Extiendes tu mano, y el poder de tu mano derecha me salva.


Los redimirá de la opresión y la violencia, porque sus vidas le son preciosas.


Ahora bien, Giezi, el sirviente de Eliseo, hombre de Dios, se dijo a sí mismo: «Mi amo no debería haber dejado ir al arameo sin aceptar ninguno de sus regalos. Tan cierto como que el Señor vive, yo iré tras él y le sacaré algo».


Pero Eliseo respondió: —Tan cierto como que el Señor vive, a quien yo sirvo, no aceptaré ningún regalo. Aunque Naamán insistió en que aceptara el regalo, Eliseo se negó.


Pero la madre del niño dijo: «Tan cierto como que el Señor vive y que usted vive, yo no regresaré a mi casa a menos que usted venga conmigo». Así que Eliseo volvió con ella.


Te juro por el Señor tu Dios que el rey te ha buscado en cada nación y reino de la tierra, desde un extremo hasta el otro ha procurado encontrarte. Cada vez que alguien le afirmaba: “Elías no está aquí”, el rey Acab obligaba al rey de esa nación a jurar que había dicho la verdad.


Ahora bien, Elías, quien era de Tisbé en Galaad, le dijo al rey Acab: «Tan cierto como que el Señor vive, el Dios de Israel —a quien sirvo—, no habrá rocío ni lluvia durante los próximos años, ¡hasta que yo dé la orden!».


El Señor me ha confirmado y me ha puesto en el trono de David, mi padre; él ha establecido mi dinastía, tal como lo prometió. Por lo tanto, ¡tan cierto como que el Señor vive, Adonías morirá hoy mismo!


Entonces David se puso furioso. —¡Tan cierto como que el Señor vive —juró—, cualquier hombre que haga semejante cosa merece la muerte!


Enseguida enviaré a un niño para que me traiga las flechas. Si oyes que le digo: “Están de este lado”, entonces sabrás, tan cierto como que el Señor vive, que todo está bien y que no hay ningún problema.


Así que Saúl escuchó a Jonatán y juró: —Tan cierto como que el Señor vive, David no será muerto.


Pero la gente intervino y le dijo a Saúl: —Jonatán ganó esta gran victoria para Israel. ¿Debe morir? ¡De ningún modo! Tan cierto como que el Señor vive, que ni un solo cabello de su cabeza será tocado, porque hoy Dios lo ayudó a hacer esta gran proeza. De modo que la gente salvó a Jonatán de la muerte.


Juro por el nombre del Señor, quien rescató a Israel, que el pecador morirá, ¡aun si fuera mi propio hijo Jonatán! Pero nadie se atrevía a decirle cuál era el problema.


—¡Eran mis hermanos, los hijos de mi propia madre! —exclamó Gedeón—. Tan cierto como que el Señor vive, les aseguro que no los mataría si ustedes no los hubieran matado a ellos.


el Ángel que me ha salvado de todo mal— bendiga a estos muchachos. Que ellos preserven mi nombre y el nombre de Abraham y de Isaac. Y que su descendencia se multiplique en gran manera por toda la tierra».


Entonces el rey David respondió: «¡Llamen a Betsabé!». Así que Betsabé volvió a entrar y se quedó de pie delante del rey,


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