Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





1 Crónicas 29:14 - Biblia Nueva Traducción Viviente

14 ¿Pero quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que podamos darte algo a ti? ¡Todo lo que tenemos ha venido de ti, y te damos solo lo que tú primero nos diste!

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

14 Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 ¿Quién soy yo, y quién es mi pueblo para que tengamos con qué ofrecerte todo esto? Porque todo viene de ti, y de tu mano proviene lo que te damos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

14 Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que podamos ofrecer voluntariamente semejantes cosas? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Porque, ¿quién soy yo y quién mi pueblo para que podamos hacerte estas ofrendas? Todo viene de ti, y de tus manos proviene lo que te damos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

14 Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer de nuestra voluntad cosas semejantes? Porque todo es tuyo, y lo recibido de tu mano te damos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




1 Crónicas 29:14
24 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Todo lo que es bueno y perfecto es un regalo que desciende a nosotros de parte de Dios nuestro Padre, quien creó todas las luces de los cielos. Él nunca cambia ni varía como una sombra en movimiento.


No es que pensemos que estamos capacitados para hacer algo por nuestra propia cuenta. Nuestra aptitud proviene de Dios.


Pues todas las cosas provienen de él y existen por su poder y son para su gloria. ¡A él sea toda la gloria por siempre! Amén.


No a nosotros, oh Señor, no a nosotros, sino a tu nombre le corresponde toda la gloria, por tu amor inagotable y tu fidelidad.


Pues Dios trabaja en ustedes y les da el deseo y el poder para que hagan lo que a él le agrada.


El pueblo se alegró por las ofrendas, porque había dado libremente y de todo corazón al Señor, y el rey David se llenó de gozo.


Entonces el rey David entró y se sentó delante del Señor y oró: «¿Quién soy yo, oh Señor Soberano, y qué es mi familia para que me hayas traído hasta aquí?


No soy digno de todo el amor inagotable y de la fidelidad que has mostrado a mí, tu siervo. Cuando salí de mi hogar y crucé el río Jordán, no poseía más que mi bastón, ¡pero ahora todos los de mi casa ocupan dos grandes campamentos!


Y esta piedra que levanté como columna conmemorativa será un lugar de adoración a Dios, y yo le daré a Dios una décima parte de todo lo que él me dé».


los veinticuatro ancianos se postran y adoran al que está sentado en el trono (el que vive por siempre y para siempre), y ponen sus coronas delante del trono, diciendo:


y mientras contemplaba la ciudad, dijo: “¡Miren esta grandiosa ciudad de Babilonia! Edifiqué esta hermosa ciudad con mi gran poder para que fuera mi residencia real a fin de desplegar mi esplendor majestuoso”.


El primer día de cada semana, cada uno debería separar una parte del dinero que ha ganado. No esperen hasta que yo llegue para luego tratar de reunirlo todo de golpe.


»¡Oh Dios nuestro, te damos gracias y alabamos tu glorioso nombre!


Estamos aquí solo por un momento, visitantes y extranjeros en la tierra, al igual que nuestros antepasados. Nuestros días sobre la tierra son como una sombra pasajera, pasan pronto sin dejar rastro.


La plata es mía y el oro es mío, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.


Pero Moisés protestó: —¿Quién soy yo para presentarme ante el faraón? ¿Quién soy yo para sacar de Egipto al pueblo de Israel?


Luego celebra el Festival de la Cosecha en honor al Señor tu Dios. Llévale una ofrenda voluntaria en proporción a las bendiciones que hayas recibido de él.


Todos darán según sus posibilidades, de acuerdo con las bendiciones que hayan recibido del Señor tu Dios.


Entonces el rey David entró y se sentó delante del Señor y oró: «¿Quién soy yo, oh Señor Dios, y qué es mi familia para que me hayas traído hasta aquí?


»¡Oh Señor nuestro Dios, aun estos materiales que hemos reunido para construir un templo para honrar tu santo nombre vienen de ti! ¡Todo te pertenece!


»Este tendrá que ser un templo magnífico porque nuestro Dios es más grande que todos los demás dioses;


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម