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1 Corintios 9:3 - Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Esta es mi respuesta a los que cuestionan mi autoridad.

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កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

3 Contra los que me acusan, esta es mi defensa:

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Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Escuchen, pues, lo que replico a quienes me critican:

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 Esta es mi respuesta a los que me acusan:°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Ésta es mi defensa frente a los que me acusan:

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 Esta es mi respuesta a los que me preguntan.

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1 Corintios 9:3
14 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

La primera vez que fui llevado ante el juez, nadie me acompañó. Todos me abandonaron; que no se lo tomen en cuenta.


Los otros no tienen intenciones puras cuando predican de Cristo. Lo hacen con ambición egoísta, no con sinceridad sino con el propósito de que las cadenas me resulten más dolorosas.


Está bien que sienta estas cosas por todos ustedes, porque ocupan un lugar especial en mi corazón. Participan conmigo del favor especial de Dios, tanto en mi prisión como al defender y confirmar la verdad de la Buena Noticia.


Les escribo todo esto antes de ir a verlos, con la esperanza de no tener que tratarlos con severidad cuando finalmente llegue. Pues mi deseo es usar la autoridad que el Señor me ha dado para fortalecerlos, no para destruirlos.


Examínense para saber si su fe es genuina. Pruébense a sí mismos. Sin duda saben que Jesucristo está entre ustedes; de no ser así, ustedes han reprobado el examen de la fe genuina.


Les daré todas las pruebas que quieran de que Cristo habla por medio de mí. Cristo no es débil cuando trata con ustedes; es poderoso entre ustedes.


Si alguien afirma ser profeta o piensa que es espiritual, debería reconocer que lo que digo es un mandato del Señor mismo;


Les hice ver que la ley romana no declara culpable a nadie sin antes tener un juicio. El acusado debe tener una oportunidad para que confronte a sus acusadores y se defienda.


«Hermanos y estimados padres —dijo Pablo—, escuchen mientras presento mi defensa».


»Cuando sean sometidos a juicio en las sinagogas y delante de gobernantes y autoridades, no se preocupen por cómo defenderse o qué decir,


Aunque otros piensen que no soy apóstol, ciertamente para ustedes lo soy. Ustedes mismos son la prueba de que soy apóstol del Señor.


¿Acaso no tenemos derecho de hospedarnos con ustedes y compartir sus comidas?


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