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Salmos 96:4 - Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Porque el Señor es grande y muy digno de alabanza, más temible que todos los dioses.

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Biblia Reina Valera 1960

4 Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Temible sobre todos los dioses.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

4 ¡Grande es el Señor! ¡Es el más digno de alabanza! A él hay que temer por sobre todos los dioses.

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La Biblia Textual 3a Edicion

4 Porque grande es YHVH, y digno de suprema alabanza, Temible sobre todos los dioses.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Pues grande es el Señor y digno de alabanza, sobre todos los dioses, el temible.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

4 Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Temible sobre todos los dioses.

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Salmos 96:4
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Grande es el Señor, muy digno de alabanza, y no puede medirse su grandeza.


Invoco al Señor que es digno de alabanzas, y me veo libre de mis enemigos.


¿Quién no dará honor y gloria a tu Nombre, oh Señor? Tú solo eres santo, y todas las naciones vendrán y se postrarán ante ti, porque tus fallos se han dado a conocer.


Pues el Señor es un Dios grande, un rey grande por encima de todos los dioses.


Dios terrible en la asamblea de los santos, grande y temible para toda su corte.


Digan a Dios: ¡Qué terribles son tus obras! Tu fuerza es tal que tus enemigos se convierten en tus aduladores.


Porque eres grande y haces maravillas, tú solo eres Dios.


Grande es el Señor y muy digno de alabanzas, en la ciudad de nuestro Dios, en su monte santo,


Yo les voy a mostrar a quién deben temer: Teman a Aquel que, después de quitarle a uno la vida, tiene poder para echarlo al infierno. Créanme que es a ése a quien deben temer.


Vengan a ver las obras de Dios: sus milagros que a los hombres espantan.


Ahora reconozco que Yavé es el más grande de los Dioses; lo demostró en el momento en que oprimían a su pueblo.


¿A mí no me temen, dice Yavé, ni tiemblan delante de mí? De mí, que puse la arena para atajar el mar, como una cerca eterna que no puede saltar. Aunque se agite bramando, no podrá pasarla con sus olas.


¡Qué terrible eres tú! ¿Quién te resistirá el día de tu ira?


Los levitas Josué, Cadmiel, Bani, Jasbadleías, Serebías, Odías, Sebanías, Betajías dijeron:


¡Ay de nosotros! ¿Quién nos librará de la mano de esos dioses poderosos? ¿No fueron ellos los que castigaron a los egipcios con toda clase de plagas en los tiempos del desierto?


La Casa que voy a edificar será grande, porque nuestro Dios es mayor que todos los dioses.


Alábenlo por sus hechos portentosos, alábenlo por toda su grandeza!


El rey se dirigió entonces a Daniel y le dijo: 'En verdad el Dios de ustedes es el Dios de los dioses, el Señor de los reyes; es él quien da a conocer los misterios ya que tú pudiste revelárnoslos.


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