Salmos 6:8 - Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Aléjense de mí, ustedes malvados, porque el Señor oyó la voz de mi llanto.

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Biblia Reina Valera 1960

⁸ Apartaos de mí, todos los hacedores de iniquidad; Porque Jehová ha oído la voz de mi lloro.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Váyanse, todos ustedes que hacen el mal, porque el Señor ha oído mi llanto.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ ¡Apartaos de mí todos vosotros, los que hacéis iniquidad! Porque YHVH ha oído la voz de mi llanto,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ mis ojos se consumen de pesar, envejecen en medio de opresores.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁸ Apartaos de mí, todos los obradores de iniquidad; porque Jehová ha oído la voz de mi llanto.

Salmos 6:8 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Lucas 13:27

Pero él les dirá de nuevo: No sé de dónde son ustedes. ¡Aléjense de mí todos los malhechores!

Salmos 145:18

Cerca está el Señor de los que le invocan, de todos los que lo invocan de verdad.

Salmos 119:115

Apártense de mi, agentes del mal, para que guarde los mandamientos de mi Dios.

Mateo 7:23

Entonces yo les diré claramente: Nunca les conocí. ¡Aléjense de mí ustedes que hacen el mal!

Salmos 3:4

Tan pronto como llamo al Señor, me responde desde su monte santo.

Hebreos 5:7

En los días de su vida mortal presentó ruegos y súplicas a aquel que podía salvarlo de la muerte; éste fue su sacrificio, con grandes clamores y lágrimas, y fue escuchado por su religiosa sumisión.

Mateo 25:41

Dirá después a los que estén a la izquierda: '¡Malditos, aléjense de mí y vayan al fuego eterno, que ha sido preparado para el diablo y para sus ángeles!'

Salmos 139:19

¡Ojalá, oh Dios, mataras al malvado y se alejaran de mí los sanguinarios;'

Isaías 30:19

Sí, pueblo de Sión, que vives en Jerusalén, ya no llorarás más. El se compadecerá de ti al sentir tus lamentos, lo llamarás y te atenderá.

Salmos 116:8

Ha librado mi alma de la muerte, de lágrimas mis ojos y mis pies de dar un paso en falso.

Isaías 38:5

Esto has de decir a Ezequías de parte de Yavé, el Dios de su padre David: He escuchado tu oración, he visto tus lágrimas; y ahora te voy a dar quince años más de vida.

Isaías 38:3

Acuérdate, por favor, que te he servido fielmente con corazón honrado y haciendo lo que te agradaba. Y se largó a llorar.

Salmos 56:8

Tu contaste mis disgustos, recogiste mis lágrimas en tu odre.

Job 17:7

Mis ojos se cierran de pena no soy más que la sombra de mí mismo.

Salmos 31:10

Mi vida se consume en la aflicción y mis años entre gemidos; mi fuerza desfallece entre tanto dolor y mis huesos se deshacen.

Lamentaciones 3:56

Oye mi grito: no cierres tu oído a mi oración.