Salmos 32:7 - Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ Tú eres un refugio para mí, me guardas en la prueba, y me envuelves con tu salvación.

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Biblia Reina Valera 1960

⁷ Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás. Selah

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Pues tú eres mi escondite; me proteges de las dificultades y me rodeas con canciones de victoria. Interludio

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Tú eres mi refugio, me guardarás de la angustia, Me rodearás con cánticos de liberación. Selah

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ Tú eres mi refugio: me libras del pesar y me ciñes del gozo del rescate. Selah

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁷ Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia: Con cánticos de liberación me rodearás. (Selah)

Salmos 32:7 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Salmos 91:1

Tú que habitas al amparo del Altísimo y resides a la sombra del Omnipotente,

Salmos 119:114

Tú eres mi refugio y mi escudo, he puesto en tu palabra mi esperanza.

Salmos 27:5

Porque él me dará asilo en su cabaña en tiempos de desdicha, me ocultará en el secreto de su tienda, y me alzará sobre la roca.

Salmos 9:9

El Señor es un bastión para el oprimido, un refugio para los tiempos de angustia.

Salmos 31:20

En secreto, junto a ti los escondes, lejos de las intrigas de los hombres; los mantienes ocultos en tu carpa, y los guardas de las querellas.

Salmos 143:9

Líbrame, Señor, de mis enemigos, pues me escondí cerca de ti.

Salmos 98:1

Entonen al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas, la salvación provino de su diestra, de su brazo de santidad.

Salmos 40:3

Puso en mi boca un cántico nuevo, de alabanza a nuestro Dios. Muchos al verlo temerán y pondrán su confianza en el Señor.

Apocalipsis 7:10

y gritaban con voz poderosa: '¿Quién salva fuera de nuestro Dios, que se sienta en el trono, y del Cordero?'

2 Samuel 22:1

David dedicó a Yavé las palabras de este cántico, el día en que Yavé lo libró de las manos de todos sus enemigos y de las manos de Saúl.

Salmos 32:10

Muchos son los dolores del impío, pero al que confía en el Señor lo envolverá la gracia.

Colosenses 3:3

Pues han muerto, y su vida está ahora escondida con Cristo en Dios.

Salmos 5:12

Pues tú, Señor, bendices al justo y como un escudo lo cubre tu favor.

Jeremías 36:26

En seguida, el rey ordenó a Jeramiel, a Seraías y a Selemías que tomaran preso al secretario Baruc y al profeta Jeremías, pero Yavé los ocultó.

Salmos 18:5

las redes de la muerte me cercaban, ante mí estaban tendidas trampas mortales.

Jueces 5:1

Aquel día, Débora y Barac, hijo de Abinoam, entonaron este cántico: