Salmos 22:21 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Sálvame de la boca del león, y de los cuernos del toro lo poco que soy.

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Biblia Reina Valera 1960

²¹ Sálvame de la boca del león, Y líbrame de los cuernos de los búfalos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Arrebátame de las fauces del león y de los cuernos de estos bueyes salvajes.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ ¡Sálvame de la boca del león Y de los cuernos de los toros salvajes! ¡Me has respondido!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ Salva mi vida de la espada, de la garra del mastín, mi bien único;

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²¹ Sálvame de la boca del león; porque tú me has escuchado de los cuernos de los unicornios.

Salmos 22:21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

2 Timoteo 4:17

Pero el Señor estuvo conmigo llenándome de fuerza, para que el mensaje fuera proclamado por medio de mí y llegara a oídos de todas las naciones; y quedé libre de la boca del león.

1 Pedro 5:8

Sean sobrios y estén vigilantes, porque su enemigo, el diablo, ronda como león rugiente buscando a quién devorar.

Números 23:22

¡Dios lo hizo salir de Egipto, y le dio cuernos de búfalo!

Hechos 4:27

Es verdad que en esta ciudad hubo una conspiración de Herodes con Poncio Pilato, los paganos y el pueblo de Israel contra tu santo siervo Jesús, a quien tú ungiste.

Juan 14:30

Ya no hablaré mucho más con ustedes, pues se está acercando el que gobierna este mundo. En mí no encontrará nada suyo,

Juan 8:59

Entonces tomaron piedras para lanzárselas, pero Jesús se ocultó y salió del Templo.

Isaías 34:7

Hoy caen los toros de este pueblo, sus bueyes y sus terneros cebados. La tierra se empapa de sangre y el polvo se impregna de grasa,

Deuteronomio 33:17

José es su toro primogénito: ¡gloria a él! Son sus cuernos, cuernos de búfalo, con los que hiere a todos los pueblos hasta los confines de la tierra. ¡Miren las muchedumbres de Efraím y los millares de Manasés!

Lucas 22:53

¿Por qué no me detuvieron cuando día tras día estaba entre ustedes en el Templo? Pero ahora reinan las tinieblas, y es la hora de ustedes.

Salmos 35:17

Señor, ¿te quedarás mirando? Rescátame de los leones rugientes, pues no tengo sino una vida.