Salmos 1:2 - Biblia Católica (Latinoamericana)

² mas le agrada la Ley del Señor y medita su Ley de noche y día.

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Biblia Reina Valera 1960

² Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.

Biblia Nueva Traducción Viviente

² sino que se deleitan en la ley del Señor meditando en ella día y noche.

La Biblia Textual 3a Edicion

² Sino que en la Ley de YHVH está su delicia, Y en su Ley medita° de día y de noche.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² sino que en la ley divina se complace y sobre ella medita, día y noche.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

² Sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche.

Salmos 1:2 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Josué 1:8

Releerás constantemente este libro de la Ley. Lo meditarás día y noche para que actúes en todo según lo que allí está escrito: de ese modo llevarás a cabo tus proyectos y tendrás éxito.

Salmos 119:92

Si en tu Ley no hubiera puesto mis delicias habría perecido en mi miseria.

Salmos 119:11

En mi corazón escondí tu palabra para no pecar contra ti.

Romanos 7:22

En mí el hombre interior se siente muy de acuerdo con la Ley de Dios,

Jeremías 15:16

Cuando me llegaban tus palabras, yo las devoraba. Tus palabras eran para mí gozo y alegría, porque entonces hacías descansar tu Nombre sobre mí, ¡oh, Yavé Sabaot!

Salmos 119:35

Guíame por la senda de tus mandamientos, pues en ésa me complazco.

Salmos 112:1

¡Aleluya! ¡Feliz el hombre que teme al Señor y valora mucho sus mandamientos!

Salmos 104:34

Ojalá que le agrade mi poema, yo, como sea, me alegro en el Señor.

Salmos 40:8

He elegido, mi Dios, hacer tu voluntad, y tu Ley está en el fondo de mi ser'.

Salmos 119:1

Dichosos los que sin yerro andan el camino y caminan según la Ley del Señor.

1 Juan 5:3

Amar a Dios es guardar sus mandatos, y sus mandatos no son pesados.

Job 23:12

no me aparté del precepto que declaró, sino que puse en mi corazón sus palabras.

1 Timoteo 4:15

Ocúpate de estas cosas y fíjate en lo que dije; así todos serán testigos de tus progresos.

Salmos 119:72

La ley de tu boca vale más para mí que millones de oro y plata.

Lucas 2:37

Permaneció viuda, y tenía ya ochenta y cuatro años. No se apartaba del Templo, sirviendo día y noche al Señor con ayunos y oraciones.

2 Timoteo 1:3

Doy gracias a Dios, a quien sirvo con conciencia limpia como mis antepasados, cuando constantemente te recuerdo en mis oraciones noche y día.

1 Tesalonicenses 2:9

Recuerden, hermanos, nuestros trabajos y fatigas. Mientras les predicábamos el Evangelio de Dios, trabajábamos noche y día para no ser una carga para ninguno.

Lucas 18:7

¿Acaso Dios no hará justicia a sus elegidos si claman a él día y noche, mientras él deja que esperen?

Salmos 88:1

Señor, mi Dios, te clamo a ti de día, y de noche me quejo en tu presencia.

Génesis 24:63

Al atardecer, como salía a dar un paseo por el campo, vio que se acercaban unos camellos.

Esdras 7:10

Pues efectivamente se había dedicado con todo su corazón al estudio de la Ley de Yavé, a ponerla en práctica y a enseñarle a Israel las leyes y las costumbres.