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Romanos 9:16 - Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Debemos concluir que lo importante no es querer, o llegar primero, sino que Dios tenga misericordia.

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Biblia Reina Valera 1960

16 Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Por lo tanto, es Dios quien decide tener misericordia. No depende de nuestro deseo ni de nuestro esfuerzo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 Así, pues, no es del que quiere, ni del que corre, sino de Dios, que tiene misericordia.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Así pues, no depende del que quiere ni del que corre, sino de Dios, que es el que tiene misericordia.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 Así que no es del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

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Romanos 9:16
20 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Ustedes han sido salvados por la fe, y lo han sido por gracia. Esto no vino de ustedes, sino que es un don de Dios;'


Pues Dios es el que produce en ustedes tanto el querer como el actuar para agradarle.


Muy libremente nos dio vida y nos hizo hijos suyos mediante la palabra de la verdad, para que fuéramos la flor de su creación.


Como todavía no habían hecho ni bien ni mal, la elección de Dios era totalmente libre y todo dependía,


En ese momento Jesús se llenó del gozo del Espíritu Santo y dijo: 'Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y entendidos y se las has dado a conocer a los pequeñitos. Sí, Padre, pues tal ha sido tu voluntad.


Me he dejado hallar por los que no preguntaban por mí y me he dejado encontrar por los que no me buscaban. Dije: 'Aquí me tienen' a una nación que no invocaba mi nombre.


El viento sopla donde quiere, y tú oyes su silbido, pero no sabes de dónde viene ni adónde va. Lo mismo le sucede al que ha nacido del Espíritu.


Tuyo es el principado desde el día de tu nacimiento; de mí en el monte sagrado tú has nacido, como nace el rocío de la aurora.


A continuación lo llevó el diablo a un monte muy alto y le mostró todas las naciones del mundo con todas sus grandezas y maravillas.


Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer.


Siguiendo una revelación, fui para exponerles el evangelio que anuncio a los paganos. Me entrevisté con los dirigentes en una reunión privada, no sea que estuviese haciendo o hubiera hecho un trabajo que no sirve.


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