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Proverbios 30:9 - Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Porque con la abundancia podría dejarte y decir: '¿Pero, quién es Yavé?' Y en la miseria podría ponerme a robar: lo que sería deshonrar el nombre de mi Dios!'

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Biblia Reina Valera 1960

9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, Y blasfeme el nombre de mi Dios.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Pues si me hago rico, podría negarte y decir: «¿Quién es el Señor?». Y si soy demasiado pobre, podría robar y así ofender el santo nombre de Dios.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 No sea que, harto, te niegue y diga: ¿Quién es YHVH? O que, siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 no sea que, saciado, me desvíe y diga: '¿Quién es Yahveh?'. O que, por la indigencia, robe y profane el nombre de mi Dios.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios.

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Proverbios 30:9
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Yo les di de comer; pero cuando estuvieron satisfechos, se llenó de orgullo su corazón y se olvidaron de mí.


Pues los estoy llevando a la tierra que bajo mi juramento prometí a sus padres, tierra que mana leche y miel, y ellos, después de comer hasta saciarse y engordar bien, se volverán hacia otros dioses, les darán culto y a mí me despreciarán y romperán mi Alianza.


Comió el Regalón y se sació, engordó Israel y dio coces, rechazó a Dios, que lo formó, despreció a su Roca, que lo salvó.


¿He sido yo para Israel un desierto o una tierra cubierta de espinos? ¿Por qué, entonces, dice mi pueblo: 'Nos apartamos de ti, no queremos verte más?'


No tomes en vano el nombre de Yavé, tu Dios, porque Yavé no dejará sin castigo a aquel que toma su nombre en vano.


Entonces Pedro empezó a proferir maldiciones y a afirmar con juramento que no conocía a aquel hombre. Y en aquelmismo momento cantó un gallo.


Pedro lo negó por segunda vez, jurando: 'Yo no conozco a ese hombre.


Josué dijo entonces al pueblo: 'Esta piedra atestiguará en contra de ustedes, porque escuchó todas las palabras que Yavé pronunció delante de nosotros. Servirá como testigo en contra de ustedes, para impedirles que renieguen de su Dios'.


Busca su propia ruina y es cómplice del ladrón, el que nada dice cuando hacen jurar a los que saben.


Lo que sigue vale para la persona que se encuentra culpable porque podía testificar respecto de algún crimen del que fue testigo ocular o del que supo y, sin embargo, al oír las palabras de la maldición contra quien no denunciara no quiso denunciar al culpable.


Respondió Faraón: '¿Quién es Yavé para que yo le haga caso y deje salir a Israel? No conozco a Yavé y no dejaré salir a Israel.


Esas palabras se cumplieron inmediatamente. Nabucodonosor fue expulsado de entre los hombres; comía pasto como el buey y el rocío del cielo mojaba su cuerpo; sus cabellos crecieron como las plumas del águila y sus uñas como las de los pájaros.


Viste un árbol que crecía y que se hacía tan importante que su copa tocaba los cielos y que se lo veía desde toda la tierra.


Jamás el cetro impío se impondrá sobre la parcela de los justos, no sea que los justos ensangrienten sus manos en el crimen.


la rebelión e hipocresía para con Yavé, y la infidelidad a nuestro Dios, nuestras traiciones y revueltas y nuestros pensamientos y juicios injustos.


Renegaron de Yavé, diciendo: '¡No existe! Nada malo nos sucederá, no veremos ni espada ni escasez.


Y esta es una palabra de Yavé: 'Ya que tú me olvidaste y te apartaste de mí, cargarás con el peso de tu vergüenza y de tus prostituciones'.


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