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Mateo 6:32 - Biblia Católica (Latinoamericana)

32 Los que no conocen a Dios se afanan por esas cosas, pero el Padre del Cielo, Padre de ustedes, sabe que necesitan todo eso.

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Biblia Reina Valera 1960

32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

32 Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades.

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La Biblia Textual 3a Edicion

32 Porque los gentiles buscan con afán todas esas cosas, pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas ellas.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

32 Por todas estas cosas se afanan los paganos. Pero bien sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todas ellas.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; mas vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

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Mateo 6:32
12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

No hagan como ellos, pues antes de que ustedes pidan, su Padre ya sabe lo que necesitan.


Estas son cosas tras las cuales corren todas las naciones del mundo, pero el Padre de ustedes sabe que ustedes las necesitan.


Les digo, pues, y con insistencia les advierto en el Señor que no imiten a los paganos, que se mueven por cosas inútiles.


Señor, que perezcan por tu mano, acaba con ellos, no los dejes vivir. Llénales el vientre de lo que les reservas, que sus hijos también queden saciados y que dejen las sobras a sus nietos.


y no se deje llevar por el deseo, como hace la gente que no conoce a Dios.


Como la ternura de un padre con sus hijos es la ternura del Señor con los que le temen.


¿Y tú reclamas para ti cosas extraordinarias? No reclames tanto, pues voy a descargar calamidades sobre todos los mortales, dice Yavé, pero a ti te concederé la vida. La guardarás como un premio por dondequiera que vayas.


Mi Dios, a su vez, proveerá a todas sus necesidades, según su inmensa riqueza en Cristo Jesús.


Miró y vio que había allí cerca de él una tortilla cocida sobre piedras y un cántaro de agua. Comió, bebió y se volvió a acostar.


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