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Mateo 25:40 - Biblia Católica (Latinoamericana)

40 El Rey responderá: 'En verdad les digo que, cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí.

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Biblia Reina Valera 1960

40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

40 »Y el Rey dirá: “Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de estos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”.

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La Biblia Textual 3a Edicion

40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo, en cuanto lo hicisteis a uno de éstos, mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicisteis.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

40 Y el rey les responderá: 'Os lo aseguro: todo lo que hicisteis con uno de estos hermanos más pequeños, conmigo lo hicisteis'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo: En cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

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Mateo 25:40
42 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El que tiene compasión del pobre le presta a Yavé: éste sabrá pagar su deuda.


El que oprime al pobre insulta a su Creador, el que tiene piedad de los indigentes le rinde homenaje.


Asimismo, el que dé un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños, porque es discípulo, no quedará sin recompensa: soy yo quien se lo digo.


Y cualquiera que les dé de beber un vaso de agua porque son de Cristo, yo les aseguro que no quedará sin recompensa.


Al aceptar la verdad, han logrado la purificación interior, de la que procede el amor sincero a los hermanos; ámense, pues, unos a otros de todo corazón,


Para los que están en Cristo Jesús ya no son ventajas el tener o no tener la circuncisión; solamente vale la fe que actúa mediante el amor.


En cambio, el fruto del Espíritu es caridad, alegría, paz, comprensión de los demás, generosidad, bondad, fidelidad,


El que los recibe a ustedes, a mí me recibe, y el que me recibe a mí, recibe a Aquel que me ha enviado. El que recibe a un profeta porque es profeta, recibirá recompensa digna de un profeta.


Cuídense, no desprecien a ninguno de estos pequeños. Pues yo se lo digo: sus ángeles en el Cielo contemplan sin cesar la cara de mi Padre del Cielo.


Si uno dice 'Yo amo a Dios', y odia a su hermano, es un mentiroso. Si no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve.


Dios no es injusto para olvidar lo que han hecho y cómo han ayudado y todavía ayudan a los santos por amor de su Nombre.


Nuestra vocación, hermanos, es la libertad. No hablo de esa libertad que encubre los deseos de la carne, sino del amor por el que nos hacemos esclavos unos de otros.


Entonces David le dijo: 'No temas, quiero tratarte con bondad debido a tu padre Jonatán. Te devolveré todas las tierras de Saúl tu abuelo, y todos los días comerás a mi mesa'.


A los que de antemano conoció, también los predestinó a ser como su Hijo y semejantes a él, a fin de que sea el primogénito en medio de numerosos hermanos.


Jesús les dijo: 'No tengan miedo. Vayan ahora y digan a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allí me verán.


Entonces el Rey dirá a los que están a su derecha: 'Vengan, benditos de mi Padre, y tomen posesión del reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo.


David preguntó: '¿Hay todavía algún sobreviviente de la familia de Saúl para que lo trate con bondad en recuerdo de Jonatán?'


No nos pregonamos a nosotros mismos, sino que proclamamos a Cristo Jesús como Señor; y nosotros somos servidores de ustedes por Jesús.


Jesús le dijo: 'Suéltame, pues aún no he subido al Padre. Pero vete donde mis hermanos y diles: Subo a mi Padre, que es Padre de ustedes; a mi Dios, que es Dios de ustedes.


construyámosle en la terraza un pequeño cuarto y pongámosle allí una cama, una mesa, una silla y una lámpara. Así, cuando pase por nuestra casa, podrá quedarse ahí'.


¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?


El Rey les responderá: 'En verdad les digo: siempre que no lo hicieron con alguno de estos más pequeños, ustedes dejaron de hacérmelo a mí.


Decían: '¡Bendito el que viene como Rey en nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en lo más alto de los cielos!'


Harán la guerra al Cordero, pero el Cordero los vencerá, porque es Señor de señores y Rey de reyes, y con él vencerán los suyos, los llamados y elegidos y que se mantienen fieles.


En el manto y en el muslo lleva escrito este título: 'Rey de reyes y Señor de señores.


Perro yo te salvaré, dice Yavé, y no caerás en manos de los hombres a los que tú tienes miedo.


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