Lucas 23:22 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²² Por tercera vez les dijo: 'Pero ¿qué mal ha hecho este hombre? Yo no he encontrado nada que merezca la muerte; por eso, después de azotarlo, lo dejaré en libertad.

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Biblia Reina Valera 1960

²² Él les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal ha hecho este? Ningún delito digno de muerte he hallado en él; le castigaré, pues, y le soltaré.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²² Por tercera vez insistió Pilato: «¿Por qué? ¿Qué crimen ha cometido? No encuentro ninguna razón para condenarlo a muerte. Lo haré azotar y luego lo soltaré».

La Biblia Textual 3a Edicion

²² Él entonces, les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal hizo éste? Ningún delito de muerte hallé en él. Después de azotarlo pues, lo soltaré.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²² Insistió Pilato por tercera vez.'¿Pues qué mal ha hecho éste? Yo no he encontrado en él ningún delito de muerte; así que le daré un escarmiento y lo pondré en libertad'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²² Y él les dijo la tercera vez: ¿Por qué? ¿Qué mal ha hecho Éste? No he hallado culpa de muerte en Él; le castigaré, pues, y le soltaré.

Lucas 23:22 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Lucas 23:14

y les dijo: 'Ustedes han traído ante mí a este hombre acusándolo de sublevar al pueblo. Pero después de interrogarlo en presencia de ustedes no he podido comprobar ninguno de los cargos que le hacen.

1 Pedro 3:18

Pues Cristo quiso morir por el pecado y para llevarnos a Dios, siendo ésta la muerte del justo por los injustos. Murió por ser carne, y luego resucitó por el Espíritu.

1 Pedro 1:19

sino con la sangre preciosa de Cristo, el Cordero sin mancha ni defecto.

Lucas 23:20

Pilato, que quería librar a Jesús, les dirigió de nuevo la palabra,

Lucas 23:16

Así que después de castigarlo lo dejaré en libertad. ('

Lucas 23:4

Pilato se dirigió a los jefes de los sacerdotes y a la multitud. Les dijo: 'Yo no encuentro delito alguno en este hombre.

Lucas 23:21

pero ellos seguían gritando: '¡Crucifícalo, crucifícalo!'

Lucas 23:23

Pero ellos insistían a grandes voces pidiendo que fuera crucificado, y el griterío iba en aumento.