Levítico 26:21 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Y si siguen enfrentándose conmigo en vez de escucharme, les devolveré siete veces más por sus pecados.

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Biblia Reina Valera 1960

²¹ Si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo añadiré sobre vosotros siete veces más plagas según vuestros pecados.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ »Si aun así permanecen hostiles conmigo y rehúsan obedecerme, aumentaré siete veces el desastre a causa de sus pecados.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ Y si andáis conmigo en oposición, y no me queréis escuchar, entonces añadiré sobre vosotros siete veces más plagas, conforme a vuestros pecados.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ Y si todavía os obstináis en oponeros a mí y no queréis escucharme, yo añadiré sobre vosotros siete veces más plagas, según vuestros pecados.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²¹ Y si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo aumentaré las plagas sobre vosotros siete veces más, de acuerdo a vuestros pecados.

Levítico 26:21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Levítico 26:18

Si ni aun así me obedecen, les devolveré siete veces más por sus pecados.

Levítico 26:27

Si con esto no me obedecen y siguen haciéndome la contra,

Apocalipsis 15:1

Vi luego en el cielo otra señal grande y maravillosa: siete ángeles que llevaban siete plagas, las últimas, porque con ellas se consuma la cólera de Dios.

Levítico 26:23

Si aun con esto no cambian su actitud respecto a mí y siguen desafiándome,

Levítico 26:24

también yo me enfrentaré con ustedes y les devolveré yo mismo siete veces más por sus pecados;'

Salmos 79:12

Paga a nuestros vecinos siete veces los insultos que te lanzaron, Señor.

Ezequiel 21:14

Hijo de hombre, profetiza. Les dirás esta palabra de Yavé: ¡Brilla la espada, la afilada!

Éxodo 9:14

Porque esta vez enviaré todas mis plagas sobre ti, tus servidores y tu pueblo, para que entiendas de una vez que no hay nadie como yo en toda la tierra.

Isaías 5:25

Por esto Yavé se enojó con su pueblo y levantó su mano para pegarle; los cerros se estremecieron y los cadáveres quedaron tirados esparcidos como la basura en las calles. Pero no se le pasó el enojo, pues siguió con su mano levantada.