Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Jueces 13:8 - Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Entonces Manoa le suplicó a Yavé: '¡Por favor, Señor! Que el hombre de Dios que enviaste venga de nuevo a vernos para decirnos cómo hay que actuar con el niño que va a nacer'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

8 Entonces oró Manoa a Jehová, y dijo: Ah, Señor mío, yo te ruego que aquel varón de Dios que enviaste, vuelva ahora a venir a nosotros, y nos enseñe lo que hayamos de hacer con el niño que ha de nacer.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Entonces Manoa oró al Señor diciendo: «Señor, te pido que el hombre de Dios vuelva a nosotros y nos dé más instrucciones acerca del hijo que nacerá».

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Entonces Manoa imploró a YHVH, y dijo: Ah, Señor mío, te ruego que venga de nuevo a nosotros aquel varón de Dios que enviaste, y nos instruya qué haremos con el niño que ha de nacer.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Manóaj invocó a Yahveh, diciendo: 'Por favor, Señor mío: que el hombre de Dios que enviaste venga de nuevo a nosotros, para que nos indique lo que debemos hacer con el niño que nazca'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

8 Entonces Manoa oró a Jehová, y dijo: Oh, Señor mío, yo te ruego que aquel varón de Dios que tú enviaste venga otra vez a nosotros y nos enseñe lo que debemos hacer con el niño que ha de nacer.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Jueces 13:8
8 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Ahora levántate y entra en la ciudad. Allí se te dirá lo que tienes que hacer.


enséñame hasta que yo sepa bien. He cometido crímenes, pero no volveré a hacerlo';'


El ángel de Yavé se apareció a la mujer y le dijo: 'Hasta ahora has sido estéril y no has tenido hijos, pero vas a concebir y darás a luz un hijo.


Al volver a su casa, la mujer conversó con su marido y le dijo: 'Un hombre de Dios vino a verme. Era tan majestuoso como un ángel de Dios, pero no le pregunté de dónde venía y no me dijo su nombre.


Pero me dijo esto: Vas a concebir y dar a luz un hijo. Por eso, desde ahora no bebas vino ni bebida alcohólica y no comas nada impuro, porque el niño estará consagrado a Dios desde el vientre de su madre y hasta el día de su muerte'.


Dios oyó la voz de Manoa y el ángel de Dios vino otra vez donde la mujer, cuando estaba sentada en el campo. Pero su marido Manoa no estaba con ella.


Manoa se levantó y siguió a su mujer. Llegó donde estaba el hombre y le preguntó: '¿Eres tú el hombre que habló con esta mujer?' El respondió: 'Sí, yo soy'.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម