Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Josué 10:39 - Biblia Católica (Latinoamericana)

39 Se apoderó de la ciudad, de su rey y de todas las ciudades que dependían de él. Las pasó a cuchillo y lanzó el anatema sobre todos los habitantes sin dejar un solo sobreviviente. Trató a Debir y a su rey como había tratado a Hebrón y como había tratado a Libna y a su rey.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

39 y la tomó, y a su rey, y a todas sus ciudades; y las hirieron a filo de espada, y destruyeron todo lo que allí dentro tenía vida, sin dejar nada; como había hecho a Hebrón, y como había hecho a Libna y a su rey, así hizo a Debir y a su rey.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

39 Josué tomó la ciudad con su rey y todas las aldeas vecinas. Destruyó por completo a todos sus habitantes y no dejó a nadie con vida. Hizo a Debir y a su rey lo mismo que les había hecho a Hebrón, a Libna y a su rey.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

39 Se apoderó de ella y de su rey, y de todas sus poblaciones, y los hirieron a filo de espada y destruyeron toda persona que había en ella, sin quedar sobreviviente. Como había hecho con Hebrón, así hizo con Debir y su rey, y con Libna y su rey.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

39 Se apoderó de ella y de su rey, así como de todas sus ciudades, a las que pasó a filo de espada y las entregó al anatema con todos sus habitantes, sin dejar supervivientes, como había hecho con Hebrón y Libná y con sus reyes.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

39 y la tomó, y a su rey, y a todas sus ciudades; y los hirieron a filo de espada, y destruyeron todas las almas que había en ella, sin quedar nada; como había hecho a Hebrón, así hizo a Debir y a su rey; y como había hecho a Libna y a su rey.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Josué 10:39
11 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El pueblo de Jacob será un fuego, el de José una llama, mientras la gente de Esaú será la paja; la quemarán y la devorarán y no quedarán restos de la raza de Esaú, porque Yavé lo ha dicho.


Jehú dio muerte a todos los que aún estaban vivos de la casa de Ajab en Yizreel: a sus consejeros, sirvientes, sacerdotes; no dejó a nadie con vida.


Yavé los puso en las manos de Israel quien los aplastó y los persiguió hasta Sidón la Grande y hasta las aguas de Misrefot y el valle de Mispá, al este. Los derrotaron de tal manera que no hubo un solo sobreviviente.


De ese modo castigó Josué a toda la región y a sus reyes: la montaña, el Negueb, las llanuras y las lomas. No dejó sobrevivientes, sino que lanzó el anatema sobre todo ser viviente como lo había ordenado Yavé, el Dios de Israel.


Se apoderaron de ella; pasaron a cuchillo la ciudad, su rey, todas las ciudades que dependían de él y a todos sus habitantes, como lo habían hecho con Eglón, sin dejar un solo sobreviviente. Josué condenó al anatema la ciudad y sus habitantes.


Entonces Horam, rey de Gazer, llegó para socorrer a Laquis, pero Josué venció al rey y a su pueblo y no dejó ningún sobreviviente.


Y Yavé entregó en nuestras manos a Og, rey de Basán, con todo su pueblo; los derrotamos en tal forma que no quedó nadie con vida.


Josué, a la cabeza de todo Israel, se dirigió hacia Debir para atacarla.


Anda pues a castigar a Amalec y lanza el anatema sobre todo lo que le pertenece. No tendrás piedad de él, darás muerte a los hombres, a las mujeres, a los niños, a los bueyes y corderos, a los camellos y burros'.


Hizo prisionero a Agag, rey de los amalecitas y pasó a cuchillo a toda la población debido al anatema.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម