Isaías 9:12 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² Mas el pueblo no se ha vuelto hacia el que le pegaba, no se ha preocupado de Yavé de los ejércitos.

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Biblia Reina Valera 1960

¹² del oriente los sirios, y los filisteos del poniente; y a boca llena devorarán a Israel. Ni con todo eso ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² Los arameos desde el oriente y los filisteos desde el occidente sacarán sus colmillos y devorarán a Israel. Pero aun así no quedará satisfecho el enojo del Señor; su puño sigue preparado para dar el golpe.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² A los sirios° desde el levante° Y a los filisteos desde el poniente,° Para que a boca llena devoren a Israel; Y con todo, no se aplaca su ira: Su mano sigue extendida.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² Pero el pueblo no se volvió a quien lo hería, no buscaron a Yahveh Sebaot.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹² del oriente los sirios, y los filisteos del poniente; y con su boca devorarán a Israel. Con todo esto no ha cesado su furor, pero su mano todavía está extendida.

Isaías 9:12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Isaías 5:25

Por esto Yavé se enojó con su pueblo y levantó su mano para pegarle; los cerros se estremecieron y los cadáveres quedaron tirados esparcidos como la basura en las calles. Pero no se le pasó el enojo, pues siguió con su mano levantada.

2 Crónicas 28:18

También los filisteos invadieron las ciudades de la tierra baja y del Negueb de Judá, y tomaron Bet-Semes, Ayalón, Guederot, Socó con sus aldeas, Timná con sus aldeas y Guimzó con sus aldeas, y se establecieron allí.

Salmos 79:7

Pues devoraron a Jacob y asolaron tu dominio.

2 Reyes 16:6

En ese tiempo el rey de Edom recuperó Elat y expulsó a los judíos que se habían instalado allí; los edomitas tomaron posesión de ella y permanecen allí hasta hoy.

Jeremías 10:25

Derrama tu enojo sobre las naciones que no te conocen, sobre los pueblos que no han invocado tu Nombre. Mira cómo están devorando a Jacob y se lo comen hasta terminarlo. Ya le han arruinado su casa.

Isaías 10:4

No quedará más que doblegarse bajo las cadenas o caer con los muertos. Pero a Yavé no se le ha pasado el enojo, aún sigue con la mano amenazante.

Isaías 9:17

Pues su maldad arde como fuego, devora zarzas y espinas, y después quema la espesura del bosque, y todos ellos se disipan como se disipa el humo.

Jeremías 35:11

Sólo que cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, invadió nuestro país, nos dijimos: 'Vamos a Jerusalén para escapar del ejército de los caldeos y del de Siria. Y nos hemos establecido en Jerusalén.

Jeremías 4:8

Por eso, vístanse con sacos, lloren y aúllen, porque Yavé no aparta de nosotros su ardiente cólera.

Deuteronomio 31:17

Aquel día me enojaré contra ellos, los abandonaré y les ocultaré mi rostro; entonces no les quedará más que ser devorados, y los alcanzarán muchos males y adversidades. Aquel día dirán: ¿No me habrán llegado estos males porque mi Dios ya no está en medio de nosotros?'

Isaías 11:14

Se dejarán caer sobre las costas de los filisteos al oeste, y juntos asaltarán a los hijos del este; extenderán su imperio sobre Edom y Moab y someterán a los amonitas.

Ezequiel 6:14

Los abatiré completamente, convertiré su país en una soledad, en una ruina doquiera habiten, desde el desierto hasta Ribla. Entonces sabrán que yo soy Yavé.

Ezequiel 16:27

Por eso, levanté mi mano contra ti, reduje tu ración y te abandoné al capricho de tus enemigos, las ciudades filisteas, que se avergonzaban de tu descarada conducta.

Isaías 31:1

¡Pobres de aquellos que bajan a Egipto, por si acaso consiguen ayuda! Pues confían en la caballería, en los carros de guerra, que son numerosos, y en los jinetes, porque son valientes. ¿Por qué no hicieron caso del Santo de Israel y no consultaron a Yavé?

Jeremías 15:7

Los he pasado por el harnero en las ciudades del país. He dejado sin hijos a mi pueblo para que desaparezca, porque no ha querido dejar el mal camino.

Oseas 7:10

Su misma arrogancia condena a Israel, pero no se han vuelto a Yavé, su Dios, ni tratan, a pesar de todo, de buscarlo.

Amós 4:6

Yo dejé sus dientes limpios por no tener qué masticar e hice que faltara el pan en todas sus ciudades, pero ustedes no se han vuelto a mí, palabra de Yavé.

Amós 4:8

La gente de dos o tres ciudades corría a otra ciudad en busca de agua, sin poder con ello calmar su sed. Y ustedes, sin embargo, no volvieron a mí, palabra de Yavé.

Amós 4:9

Yo les mandé la tiña y la polilla a todos sus jardines y viñedos; y devoró la langosta sus higueras y olivos. Con todo, ustedes no volvieron a mí, palabra de Yavé.

Amós 4:10

Desencadené sobre ustedes una peste parecida a la de Egipto; masacré por la espada a sus jóvenes y se llevaron a todos sus caballos; hice que subiera hasta sus narices la hediondez de sus muertos en combate. Y ustedes, sin embargo, no volvieron a mí, palabra de Yavé.

Amós 4:11

Los he estremecido como estremecí a Sodoma y Gomorra, y quedaron ustedes como un tizón sacado del fuego. Y ustedes, sin embargo, no volvieron a mí, palabra de Yavé.

Sofonías 1:6

a los que se separan de Yavé y dejan de seguirlo y no lo consultan.

Sofonías 3:2

No ha escuchado el llamado, no ha aceptado la corrección, no ha puesto su confianza en Yavé ni se ha acercado a su Dios.