Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Isaías 66:13 - Biblia Católica (Latinoamericana)

13 Como un hijo a quien consuela su madre, así yo los consolaré a ustedes.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

13 Como aquel a quien consuela su madre, así os consolaré yo a vosotros, y en Jerusalén tomaréis consuelo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

13 Los consolaré allí, en Jerusalén, como una madre consuela a su hijo».

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

13 Como a uno que consuela su madre, Así Yo os consolaré; en Jerusalem seréis consolados;

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 Como uno a quien su madre consuela, así os consolaré yo: en Jerusalén seréis consolados'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

13 Como uno a quien consuela su madre, así os consolaré yo, y en Jerusalén seréis consolados.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Isaías 66:13
13 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El nos conforta en toda prueba, para que también nosotros seamos capaces de confortar a los que están en cualquier dificultad, mediante el mismo consuelo que recibimos de Dios.


a pesar de que, como apóstoles de Cristo, hubiéramos podido ser pesados. Por el contrario nos hicimos pequeños entre ustedes, imitando a la madre que juega con su criatura.


Pues bien, Yavé se ha compadecido de Sión y ahora quiere dar vida a sus ruinas, transformar su soledad en un Paraíso y su sequedad en un jardín de Yavé. Entonces se lo agradecerán, tocando música y lanzando vivas de entusiasmo y de alegría.


Consuelen, dice Yavé, tu Dios, consuelen a mi pueblo.


Alégrense con Jerusalén, y que se feliciten por ella todos los que la aman. Siéntanse, ahora, muy contentos con ella todos los que por ella anduvieron de luto,


Que mi lengua se me pegue al paladar si de ti no me acuerdo, si no considero a Jerusalén como mi máxima alegría.


Bendito sea Dios, Padre de Cristo Jesús, nuestro Señor, Padre lleno de ternura, Dios del que viene todo consuelo.


Cuando las preocupaciones me asediaban, tus consuelos me alegraban el alma.


Y dirás aquel día: 'Te doy gracias, Yavé, porque estabas enojado conmigo, pero se te pasó el enojo y me levantaste.


Hablen a Jerusalén, hablen a su corazón, y díganle que su jornada ha terminado, que ha sido pagada su culpa, pues ha recibido de manos de Yavé doble castigo por todos sus pecados.


¡Cielos, griten de alegría! ¡Tierra, alégrate! Cerros, salten y canten de gozo porque Yavé ha consolado a su pueblo y se ha compadecido de los afligidos.


Yo, yo soy el que te consuela. ¿Por qué tienes miedo a los hombres que mueren, a un hijo de hombre que desaparecerá como el pasto?


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម