Isaías 65:11 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹¹ Pero a ustedes, que abandonan a Yavé, que se olvidan de su Cerro Santo, que le preparan una mesa a Gad y que llenan la copa de Meni,

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Biblia Reina Valera 1960

¹¹ Pero vosotros los que dejáis a Jehová, que olvidáis mi santo monte, que ponéis mesa para la Fortuna, y suministráis libaciones para el Destino;

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹¹ »Pero como el resto de ustedes abandonó al Señor y se olvidó de su templo, y como preparó fiestas para honrar al dios de la Fortuna y le ofreció vino mezclado al dios del Destino,

La Biblia Textual 3a Edicion

¹¹ Pero vosotros, los que abandonáis a YHVH, Y os olvidáis de mi Santo Monte; Los que preparáis una mesa para Fortuna,° Y lleváis la copa para el Destino,°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹¹ Pero a vosotros, los que abandonáis a Yahveh, los que olvidáis mi santa montaña, los que preparáis una mesa a la Fortuna, los que lleváis vino aromático al Destino,

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹¹ Pero vosotros sois los que dejáis a Jehová, que olvidáis mi santo monte, que ponéis mesa para esa tropa, y suministráis libaciones para ese número.

Isaías 65:11 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Isaías 2:2

Al fin de los tiempos, el cerro de la Casa de Yavé será puesto sobre los altos montes y dominará los lugares más elevados.

Isaías 1:28

rebeldes y pecadores serán destrozados y aquellos que se alejen de Yavé, perecerán.

Deuteronomio 32:17

Sacrificaron, no a Dios, sino a demonios. a dioses que no eran suyos, dioses nuevos, recién llegados, a los que nunca veneraron sus padres.

Hebreos 12:22

Ustedes, en cambio, se han acercado al cerro de Sión, a la ciudad del Dios vivo, a la Jerusalén celestial con sus innumerables ángeles,

Jeremías 17:13

esperanza de Israel, Yavé, los que te traicionan serán confundidos. Los que se rebelan serán borrados del país, porque abandonaron el manantial de agua viva.

Jeremías 2:28

Pues, ¿dónde están tus dioses que tú mismo hiciste? ¡A ver si te salvan en el tiempo de tu desgracia! Porque tus dioses, pueblo de Judá, son tan numerosos como tus ciudades.

Isaías 65:25

El lobo pastará junto con el cordero; el león comerá paja como el buey y la culebra se alimentará de tierra. No harán más daño ni perjuicio en todo mi santo cerro, dice Yavé.

Isaías 57:13

Cuando pidas auxilio, ¡que te salven tus ídolos despreciables! El viento se los llevará a todos, desaparecerán de un soplo. Pero aquel que confía en mí poseerá el país y será dueño de mi Cerro Santo.

Isaías 56:7

los llevaré a mi cerro santo y haré que se sientan felices en mi Casa de oración. Serán aceptados los holocaustos y los sacrificios que hagan sobre mi altar, ya que mi casa será llamada Casa de oración para todos los pueblos.

Isaías 11:9

No cometerán el mal, ni dañarán a su prójimo en todo mi Cerro santo, pues, como llenan las aguas el mar, se llenará la tierra del conocimiento de Yavé.

Salmos 132:13

Y el Señor escogió a Sión, quiso que fuera su residencia:

1 Crónicas 28:9

Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón entero y con ánimo cariñoso, porque Yavé sondea a todos los corazones y penetra los pensamientos en todas sus formas. Si lo buscas, se dejará encontrar, pero si lo dejas, él te arrojará para siempre.

Salmos 137:5

¡Si me olvido de ti, Jerusalén, que mi derecha se olvide de mí!

Isaías 1:4

¡Ay, gente pecadora, pueblo cargado de crímenes, raza de malvados, hijos perversos! Han abandonado a Yavé, han despreciado al Santo de Israel.

Isaías 2:3

Irán a verlo todas las naciones y subirán hacia él muchos pueblos, diciendo: 'Vengan, subamos al cerro de Yavé, a la Casa del Dios de Jacob, para que nos enseñe sus caminos y caminemos por sus sendas. Porque la enseñanza irradia de Sión, de Jerusalén sale la palabra de Yavé.

Isaías 66:20

y de todos los pueblos traerán a todos tus hermanos dispersos como una ofrenda a Yavé, a caballo, en carro, en carretas, a lomo de mula o de camello. Me los traerán a mi cerro santo en Jerusalén, igual que los hijos de Israel me traen sus regalos para el templo de Yavé en vasos puros.

Jeremías 19:4

por haberme abandonado, profanando este lugar, y ofrecido incienso a dioses extranjeros que ni ellos, ni sus padres, ni los reyes de Judá conocían. Han llenado este lugar de sangre inocente

2 Reyes 21:3

Reconstruyó los Altos Lugares que su padre Ezequías había hecho desaparecer. Erigió un altar a Baal e hizo un poste sagrado tal como lo había hecho Ajab, rey de Israel; se postró ante todo el ejército de los Cielos y se puso a servirlo.

Jeremías 7:18

Los hijos amontonan la leña, los padres encienden el fuego y las mujeres amasan para hacer tortas a la reina del cielo. Y luego derraman vino en honor de dioses extranjeros, para así ofenderme.