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Isaías 42:15 - Biblia Católica (Latinoamericana)

15 Ahora voy a talar los montes y los cerros, a secar toda la vegetación; convertiré los ríos en pantanos y secaré las lagunas.

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Biblia Reina Valera 1960

15 Convertiré en soledad montes y collados, haré secar toda su hierba; los ríos tornaré en islas, y secaré los estanques.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

15 Allanaré los montes y las colinas y arruinaré toda su vegetación. Convertiré los ríos en tierra seca y secaré todas las lagunas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

15 Devastaré montes y collados, Haré agostar todo su verdor; Convertiré los ríos en islotes, Y secaré las lagunas.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Desecaré montañas y colinas y agostaré todo su verdor; haré de los ríos, islotes y agotaré los pantanos.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

15 Asolaré montañas y collados, y secaré toda su hierba; los ríos convertiré en islas, y secaré los estanques.

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Isaías 42:15
22 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

O bien, ¿a quién debo yo dinero, y a quién los he vendido? Por culpa de sus pecados fueron vendidos y por sus infidelidades me divorcié de su madre. ¿Por qué, cuando llegué, no encontré a nadie, y cuando llamé, nadie me respondió? ¿Se me habrá acortado el brazo, que no alcanza a salvar, o será que ya no tengo fuerzas? Con un solo gesto dejo seco el mar y cambio los ríos en desiertos. Sus peces, sin agua, quedan en seco y mueren de sed.


Yo digo al océano: '¡Sécate!', y sus fuentes se cierran.


Luego vi un trono grande y espléndido y a uno que estaba sentado en él; el cielo y la tierra huyeron al verlo sin que quedaran huellas de ellos.


Se produjeron relámpagos, retumbar de truenos y un violento terremoto. Nunca hubo terremoto tan violento como éste desde que hay hombres sobre la tierra.


El sexto ángel derramó su copa en el gran río Eufrates, y sus aguas se secaron, dejando un paso libre para los reyes de oriente.


En ese momento se produjo un violento terremoto y se derrumbó la décima parte de la ciudad, pereciendo en el cataclismo siete mil personas. Los supervivientes se llenaron de espanto y reconocieron al Dios del cielo.


Cruzarán el Mar Rojo, quedará seco el cauce del Nilo. Será aplastado el orgullo de Asur y no habrá más rey en Egipto.


Esto dice Yavé: 'Dentro de muy poco tiempo sacudiré los cielos y la tierra, los mares y los continentes.


Ante mí temblarán los peces del mar, las aves del cielo, los animales del campo, todos los reptiles que se arrastran por el suelo y todos los hombres que están en la tierra. Las montañas se hundirán, los acantilados se derrumbarán y todas las fortificaciones caerán.


Miré a los montes, y temblaban; a los cerros, y se sacudían.


Haré caminos a través de las montañas y pavimentaré los senderos..


Tembló la tierra y se estremeció, se sacudieron las bases de los montes, que temblaban con sólo ver su furor.


Mira que te convierto en un rastrillo nuevo y con doble hilera de dientes: molerás los cerros y los harás polvo, y dejarás las lomas como paja.


En mi celo y en el ardor de mi cólera, lo digo: Sí, ese día será un terremoto para Israel.


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