Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Isaías 34:16 - Biblia Católica (Latinoamericana)

16 se encontrarán unos con otros. Abran el libro de Yavé y lean, ¡ven que no falta ninguno! Así es, pues su misma boca lo ha ordenado y su soplo los ha juntado.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

16 Inquirid en el libro de Jehová, y leed si faltó alguno de ellos; ninguno faltó con su compañera; porque su boca mandó, y los reunió su mismo Espíritu.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Escudriñen el libro del Señor y vean lo que él hará. Ninguno de estos animales ni de estas aves estará ausente, y a ninguno le faltará su pareja, porque el Señor lo ha prometido. Su Espíritu hará que todo esto se haga realidad.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Escudriñad el Rollo de YHVH° y leed: Ni uno solo de ellos falta, Ninguno echará de menos al otro, Porque la Boca lo ha ordenado, Y su Aliento los ha congregado.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Investigad en el libro de Yahveh y leed; no falta ni uno de ellos, pues fue su boca quien lo ordenó y su espíritu quien los juntó.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 Inquirid en el libro de Jehová, y leed si faltó alguno de ellos; ninguno faltó con su compañera; porque su boca mandó y los reunió su mismo Espíritu.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Isaías 34:16
22 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

pues él habló y todo fue creado, lo ordenó y las cosas existieron.


Releerás constantemente este libro de la Ley. Lo meditarás día y noche para que actúes en todo según lo que allí está escrito: de ese modo llevarás a cabo tus proyectos y tendrás éxito.


En verdad les digo: mientras dure el cielo y la tierra, no pasará una letra o una coma de la Ley hasta que todo se realice.


Por su palabra surgieron los cielos, y por su aliento todas las estrellas.


Anda, ahora, y escribe esto en una pizarra o en un libro, para que sea, en el futuro, algo que siempre los esté acusando.


No se puede cambiar la Escritura, y en ese lugar llama dioses a los que recibieron esta palabra de Dios.


Pon todo tu celo en instruirte, abre tus oídos a las palabras sabias.


El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.


Así hablaban entre sí los que respetan a Yavé. Yavé, que estaba escuchando, lo supo, y mandó en seguida que en un libro se anotaran los nombres de aquellos que lo respetaban y reverenciaban su Nombre.


En realidad, el Señor Yavé no hace nada sin comunicárselo antes a sus servidores, los profetas.


Añadió: '¿Sabes por qué he venido donde ti? Te anunciaré lo que está escrito en el libro de la verdad. Y luego regresaré a luchar con el príncipe de Persia. También está por llegar el príncipe de Yaván; nadie me ayuda contra ellos, excepto Miguel, el príncipe de ustedes.


entonces, te sentirás feliz con Yavé. Yo te llevaré por las cumbres de la tierra, y te mantendré con la propiedad de tu padre Jacob; la boca de Yavé te lo asegura.


A consecuencia de esto creemos más firmemente en el mensaje de los profetas, y deben tenerlo como una lámpara que luce en un lugar oscuro, hasta que se levante el día y el lucero de la mañana brille en sus corazones.


pero si ustedes insisten en desobedecerme, será la espada la que los devore; porque ésta es palabra de Yavé.


Por mi parte, voy a mandar el diluvio, o sea, las aguas sobre la tierra, para acabar con todo ser que tiene aliento y vida bajo el cielo; todo cuanto existe en la tierra perecerá.


Ustedes escudriñan las Escrituras pensando que encontrarán en ellas la vida eterna, y justamente ellas dan testimonio de mí.


Y cuando les sucedan males y calamidades sinnúmero, este cántico dará testimonio contra ellos, ya que sus descendientes no lo olvidarán. Pues conozco esa gente y no se me escapan sus malas disposiciones cuando todavía no han entrado en la tierra que les tengo prometida.


¡Que den aullidos en la alcaldía, que grite la ciudad! Filistea entera se queda sin ánimo. Porque por el norte se levanta una humareda, ¡y nadie de sus soldados abandona las filas!


Porque aparecerá la gloria de Yavé y todos los mortales a una verán que Yavé fue el que habló.


Pongan la cara hacia arriba y miren: ¿Quién ha creado todos esos astros? El, él mismo, que hace salir en orden su ejército, y que llama a cada estrella por su nombre. Su fuerza es tan grande y su poder tan inmenso, que ninguna se hace la desentendida.


y no quedará casi nada de los arqueros valientes de Quedar -esto es palabra de Yavé, el Dios de Israel.


Entonces continuó: 'Estas siete lámparas son los ojos de Yavé que miran por toda la tierra.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម