Isaías 1:8 - Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Aquí está la Hija de Sión como cabaña de viña, como choza de melonar, como ciudad que ha sufrido un largo sitio.

កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Y queda la hija de Sion como enramada en viña, y como cabaña en melonar, como ciudad asolada.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ La hermosa Jerusalén está abandonada como el refugio del cuidador en un viñedo, como la choza en un campo de pepinos después de la cosecha, como una ciudad indefensa y sitiada.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ La hija de Sión° ha quedado como cobertizo de viñedo, Como choza de melonar, como ciudad sitiada.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ La hija de Sión ha quedado como cabaña en viña, como choza en melonar, como ciudad sitiada.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁸ Y queda la hija de Sión como choza en viña, y como cabaña en melonar, como ciudad asolada.

Isaías 1:8 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Zacarías 9:9

Salta, llena de gozo, oh hija de Sión, lanza gritos de alegría, hija de Jerusalén. Pues tu rey viene hacia ti; él es santo y victorioso, humilde, y va montado sobre un burro, sobre el hijo pequeño de una burra.

Juan 12:15

según dice la Escritura: No temas, ciudad de Sión, mira que viene tu Rey montado en un burrito.

Zacarías 2:10

¡Ea!, salgan del país del norte, dice Yavé, pues yo los he dispersado a los cuatro puntos cardinales.

Isaías 62:11

Pues Yavé lanza una proclamación, que la oigan hasta en el último rincón de la tierra: 'Díganle a la hija de Sión: Mira cómo ya llega tu Salvador. Anda trayendo el premio por su victoria y delante de él van sus trofeos.

Isaías 10:32

Hoy mismo hará un alto en Nob, y extenderá su brazo sobre el cerro de la hija de Sión, la colina de Jerusalén...

Lamentaciones 2:6

Ha forzado sus murallas como un huerto, ha destruido su lugar de reunión. Yavé ha hecho olvidar en Sión solemnidades y sábados; en el ardor de su cólera ha desechado al rey y al sacerdote.

Lamentaciones 2:1

Ay, ¡cómo ha oscurecido, en su cólera, el Señor a la Hija de Sión! Ha derribado del cielo a la tierra la gloria de Israel; en su enojo no se acordó de su Templo, en que descansaron sus pies.

Isaías 37:22

y ésta es la palabra que Yavé ha pronunciado contra él: La Virgen de Sión te desprecia y se ríe de ti, la hija de Jerusalén te hace burlas por la espalda.

Isaías 4:4

lavar de sus inmundicias a las hijas de Sión, y para limpiar a Jerusalén de la sangre que ha sido derramada en ella, con el soplo de su justicia que es un soplo de fuego.

Salmos 9:14

para que proclame tus maravillas, en las puertas de la hija de Sión, feliz y agradecido por tu salvación.

Job 27:18

La casa que edificó no vale más que un nido, es como cabaña que construye un guardia.

Jeremías 4:17

rodean a Jerusalén como los que cuidan una propiedad, porque se rebeló contra mí, dice Yavé.

Isaías 8:8

¡Llega hasta Judá inundándolo todo, sus aguas le llegan hasta el cuello! Aquí está y sus alas abiertas cubren todo lo ancho de tu país, ¡oh Emmanuel!

Isaías 1:7

Su país es una soledad con ciudades hechas cenizas; ustedes vieron las cosechas, y el enemigo se las comió; esta ruina no es menos que la de Sodoma.

Isaías 1:9

¡Menos mal que Yavé de los Ejércitos no ha dejado un resto! Pues por poco nos parecemos a Sodoma y somos igual que Gomorra.

Isaías 49:21

¿Quién me habrá dado a luz a toda esta gente? Pues yo estaba sin hijos y no los podía tener, estaba abandonada, en el exilio, ¿quién me los habrá criado? Porque yo había quedado sola. Y éstos, ¿de dónde vienen ahora?

Jeremías 6:2

No te comparabas con una deliciosa pradera, hija de Sión;'

Isaías 29:3

Instalaré mi campamento frente a ti como David, te rodearé de empalizadas y cavaré trincheras a tu alrededor.

Isaías 30:17

Mil huirán ante la amenaza de uno solo, y ante el ataque de cinco todos ustedes huirán; y sólo sobrevivirá de ustedes un resto, como un poste en la cumbre de un cerro o como un palo de bandera en una colina.

Isaías 37:4

¡Ojalá Yavé, tu Dios, haya escuchado las palabras del general al que el rey de Asur mandó para que insultara al Dios vivo, y pueda Yavé tu Dios castigar esas palabras! ¡Ruega a Dios por los pocos que todavía quedamos!'