Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Hechos 6:1 - Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Por aquellos días, como el número de los discípulos iba en aumento, hubo quejas de los llamados helenistas contra los llamados hebreos, porque según ellos sus viudas eran tratadas con negligencia en la atención de cada día.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

1 En aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de que las viudas de aquellos eran desatendidas en la distribución diaria.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Al multiplicarse los creyentes rápidamente, hubo muestras de descontento. Los creyentes que hablaban griego se quejaban de los que hablaban hebreo diciendo que sus viudas eran discriminadas en la distribución diaria de los alimentos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

1 En aquellos días, habiéndose multiplicado el número de los discípulos, hubo murmuración de los helenistas° contra los hebreos, porque sus viudas° eran desatendidas en el servicio diario.°

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Por aquellos días, al aumentar el número de los discípulos, surgieron quejas de los helenistas contra los hebreos, porque a sus viudas no se les prestaba suficiente atención en la asistencia cotidiana.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

1 Y en aquellos días, multiplicándose el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de que sus viudas eran desatendidas en el ministerio cotidiano.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Hechos 6:1
38 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

y lo depositaban a los pies de los apóstoles, que lo repartían según las necesidades de cada uno.


Los que acogieron la palabra de Pedro se bautizaron, y aquel día se unieron a ellos unas tres mil personas.


Hermanos: no se peleen unos con otros, y así no serán juzgados; miren que el juez está a la puerta.


Pedro se fue sin más con ellos. Apenas llegó lo hicieron subir a la habitación del piso superior, donde le presentaron a todas las viudas, que estaban llorando, y le mostraban las túnicas y mantos que Tabita hacía mientras vivía con ellas.


La Palabra de Dios se difundía; el número de los discípulos en Jerusalén aumentaba considerablemente, e incluso un buen grupo de sacerdotes había aceptado la fe.


Alababan a Dios y se ganaban la simpatía de todo el pueblo; y el Señor agregaba cada día a la comunidad a los que quería salvar.


Nací de la raza de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo e hijo de hebreos, y fui circuncidado a los ocho días. ¿Observaba yo la Ley? Por supuesto, pues era fariseo,


Sin embargo, unos hombres de Chipre y de Cirene, que habían llegado a Antioquía, se dirigieron también a los griegos y les anunciaron la Buena Noticia del Señor Jesús.


Ella abrió los ojos, reconoció a Pedro y se sentó. El le dio la mano y la ayudó a levantarse; luego llamó a los santos y a las viudas y se la presentó viva.


Hablaba a los helenistas y discutía con ellos, pero planearon matarle.


Más aún, cantidad de hombres y mujeres llegaban a creer en el Señor, aumentando así su número.


Pero muchos de los que habían oído la Palabra creyeron, y su número llegó a unos cinco mil hombres.


¿Son hebreos? También yo lo soy. ¿Son israelitas? También yo. ¿Son descendientes de Abrahán? También yo. ¿Son ministros de Cristo?


vendían sus bienes y propiedades y repartían después el dinero entre todos según las necesidades de cada uno.


Por lo tanto, ¡ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, que son unos hipócritas! Ustedes cierran a la gente el Reino de los Cielos. No entran ustedes, ni dejan entrar a los que querrían hacerlo.


Cuando venga a ustedes para hacer justicia, exigiré un castigo inmediato para los hechiceros y los adúlteros, para los que hacen falsos juramentos, para los que abusan del asalariado, de la viuda y del huérfano, para los que no respetan los derechos del extranjero.


Y allí resonarán los cantos de acción de gracias y los gritos de alegría. Los multiplicaré en vez de disminuirlos, los honraré en lugar de humillarlos.


En los días que vienen le saldrán brotes a Jacob, Israel dará brotes y florecerá, y sus frutos llenarán el mundo entero.


dejen de hacer el mal y aprendan a hacer el bien. Busquen la justicia, den sus derechos al oprimido, hagan justicia al huérfano y defiendan a la viuda.


¡Abundancia de trigo habrá en la tierra, que cubrirá la cima de los montes; que abunde en fruto como el Líbano, se multiplicarán como hierba de la tierra!'


No sin razón dice la Escritura que el espíritu que habita en nosotros quiere tener cada vez más;'


La religión verdadera y perfecta ante Dios, nuestro Padre, consiste en esto: ayudar a los huérfanos y a las viudas en sus necesidades y no contaminarse con la corrupción de este mundo.


No inscribas entre las viudas más que a quien ya pasó los sesenta años, casada una sola vez


Tampoco se quejen contra Dios, como se quejaron muchos de ellos y fueron eliminados por el ángel exterminador.


Les habíamos advertido y prohibido enseñar en nombre de ése. Pero ahora en Jerusalén no se oye más que su predicación, y quieren echarnos la culpa por la muerte de ese hombre.


Dentro de ti se desprecia al padre y a la madre, se maltrata al extranjero, se trata con violencia al huérfano y a la viuda.


Tuyo es el principado desde el día de tu nacimiento; de mí en el monte sagrado tú has nacido, como nace el rocío de la aurora.


No les negué a los pobres lo que deseaban, ni a la viuda dejé aguardando en vano.


la bendición del desgraciado caía sobre mí, y yo alegraba el corazón de la viuda.


El tercer año, año del diezmo, cuando hayas acabado de separar el diezmo de todas tus cosechas y se lo hayas dado al levita, al forastero, a la viuda y al huérfano, para que lo coman en tu misma ciudad hasta saciarse,


Los Doce reunieron la asamblea de los discípulos y les dijeron: 'No es correcto que nosotros descuidemos la Palabra de Dios por hacernos cargo de las mesas.


y apenas lo encontró lo llevó a Antioquía. En esta Iglesia trabajaron juntos durante un año entero, instruyendo a muchísima gente, y fue en Antioquía donde los discípulos por primera vez recibieron el nombre de cristianos.


Entonces cada uno de los discípulos empezó a ahorrar según sus posibilidades, destinando esta ayuda a los hermanos de Judea.


si eres diácono, cumple tu misión; si eres maestro, enseña;'


Atiende a las viudas que son realmente viudas.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម