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Hechos 15:28 - Biblia Católica (Latinoamericana)

28 Fue el parecer del Espíritu Santo y el nuestro no imponerles ninguna otra carga fuera de las indispensables:

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Biblia Reina Valera 1960

28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias:

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Biblia Nueva Traducción Viviente

28 »Pues nos pareció bien al Espíritu Santo y a nosotros no imponer sobre ustedes una carga mayor que estos pocos requisitos:

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La Biblia Textual 3a Edicion

28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros carga alguna, excepto estas cosas necesarias:

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

28 que el Espíritu Santo y nosotros hemos decidido no imponeros otra carga, fuera de éstas que son indispensables:

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

28 Pues ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias.

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Hechos 15:28
14 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Y cuando venga él, el Espíritu de la Verdad, los guiará en todos los caminos de la verdad. El no viene con un mensaje propio, sino que les dirá lo que escuchó y les anunciará lo que ha de venir.


Pues mi yugo es suave y mi carga liviana.


Ahora escúchenme los demás de Tiatira que no comparten esa doctrina: no los heriré a ustedes que no han conocido sus 'misterios', como ellos dicen, que son los misterios de Satanás.


Estaban preparando lo que mantiene a los ángeles en suspenso, y que ahora les ha sido anunciado a ustedes por sus evangelizadores, al mismo tiempo que el Espíritu Santo les era enviado desde el cielo. Y les fue revelado que todo esto sería, no para ellos, sino para ustedes.


Los que entre ustedes son considerados profetas o personas espirituales reconocerán que lo que les escribo es mandato del Señor.


De todos modos será más feliz si permanece sin casarse; éste es mi consejo. Y creo que yo también tengo el Espíritu de Dios.


Por esto pienso que no debemos complicar la vida a los paganos que se convierten a Dios.


Y Dios, que conoce los corazones, se declaró a favor de ellos, al comunicarles el Espíritu Santo igual que a nosotros.


Nosotros somos testigos de esto y lo es también el Espíritu Santo, que Dios ha dado a los que le obedecen.


Por eso, el que no haga caso de estas advertencias desobedece, no a un hombre, sino al mismo Dios, que les da a ustedes su Espíritu Santo.


Respecto a los que se mantienen vírgenes, no tengo mandato alguno del Señor; pero los consejos que les doy son los de un hombre a quien el Señor en su bondad ha hecho digno de crédito.


Pero ahora, reunidos en asamblea, hemos decidido elegir algunos hombres y enviarlos a ustedes junto con los queridos hermanos Bernabé y Pablo,


Preparan pesadas cargas, muy difíciles de llevar, y las echan sobre las espaldas de la gente, pero ellos ni siquiera levantan un dedo para moverlas.


A su paso de ciudad en ciudad iban entregando las decisiones tomadas por los apóstoles y presbíteros en Jerusalén y exhortaban a que las observaran.


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