Hebreos 12:18 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁸ Recuerden su iniciación. No hubo aquel fuego físico que ardía junto a la nube oscura y la tempestad,

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁸ Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁸ Ustedes no se han acercado a una montaña que se pueda tocar, a un lugar que arde en llamas, un lugar de oscuridad y tinieblas, rodeado por un torbellino, como les sucedió a los israelitas cuando llegaron al monte Sinaí.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁸ Porque no os habéis acercado a un monte° palpable y que ardía en fuego, y a oscuridad, y tinieblas, y al torbellino,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁸ Ahora bien, vosotros no os habéis acercado a realidades palpables: fuego ardiente, tinieblas, torbellino,

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁸ Porque no os habéis acercado al monte que se podía tocar, que ardía con fuego, y al turbión, y a la oscuridad, y a la tempestad,

Hebreos 12:18 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Deuteronomio 4:11

Entonces ustedes se acercaron y permanecieron al pie del monte. Este ardió en llamas hasta el mismo cielo entre tinieblas de nube y espesa niebla.

Éxodo 24:17

La Gloria de Yavé estaba en la cumbre del monte y los hijos de Israel la veían semejante a un fuego ardiente;'

Éxodo 20:18

Mientras tanto, todo el pueblo estaba mirando: todo era truenos, relámpagos y sonido de trompeta en el cerro que humeaba. Al verlo el pueblo temblaba de miedo, y se mantenían a distancia.

2 Timoteo 1:7

Porque Dios no nos dio un espíritu de timidez, sino un espíritu de fortaleza, de amor y de buen juicio.

2 Corintios 3:9

Si tan grande fue el ministerio que sentenciaba la condenación, ¿no lo será mucho más todavía el que procura la santidad?

Romanos 6:14

El pecado ya no los volverá a dominar, pues no están bajo la Ley, sino bajo la gracia.

Romanos 8:15

Entonces no vuelvan al miedo; ustedes no recibieron un espíritu de esclavos, sino el espíritu propio de los hijos, que nos permite gritar: ¡Abba!, o sea: ¡Papá!'

Deuteronomio 5:5

Entonces yo estaba entre Yavé y ustedes y los tuve informados, pues aquel fuego los mantenía a distancia, y ustedes no subieron al monte. Estas fueron sus palabras:

2 Corintios 3:7

Cuando se dieron leyes grabadas en tablas de piedra, ese ministerio fue rodeado de gloria, a pesar de que no traía más que sentencias de muerte; eso no obstante, los israelitas no podían fijar su mirada en el rostro de Moisés a causa de su resplandor, aunque era fugaz.