Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Génesis 31:38 - Biblia Católica (Latinoamericana)

38 En veinte años que llevo contigo, tus ovejas y tus cabras no han malparido, y nunca he comido ni un cordero de tus rebaños.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

38 Estos veinte años he estado contigo; tus ovejas y tus cabras nunca abortaron, ni yo comí carnero de tus ovejas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

38 »Durante veinte años he estado contigo, cuidando de tus rebaños. En todo ese tiempo, tus ovejas y tus cabras nunca abortaron. En todos esos años, nunca tomé ni un solo carnero tuyo para comérmelo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

38 En estos veinte años he estado contigo, tus ovejas y tus cabras nunca abortaron, ni yo comí carneros de tu rebaño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

38 Mira, he pasado veinte años contigo; tus ovejas y tus cabras no abortaron, y no me he comido los corderos de tu rebaño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

38 Estos veinte años he estado contigo: tus ovejas y tus cabras nunca abortaron, ni yo comí los carneros de tu rebaño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Génesis 31:38
9 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Bendito será el fruto de tus entrañas y el fruto de tu tierra, las crías de tus burras, el parto de tus vacas y ovejas.


No habrá en tu país mujer que aborte o sea estéril; y prolongaré los días de tu vida.


Poco era lo que tenías antes de que yo llegara aquí; pero después creció enormemente y Yavé te ha bendecido. ¿Cuándo, pues, podré trabajar para mi propia casa?'


Labán le contestó: 'Hazme un favor. El cielo me hizo ver que Yavé me bendecía gracias a ti.


Pues me ocurrió una vez, cuando era el tiempo en que entraban en celo las ovejas, que alcé los ojos y vi entre sueños que los machos que cubrían a las hembras eran rayados, manchados y de varios colores.


Después de revisar todas mis cosas, ¿qué objeto de tu casa has encontrado? Colócalo aquí, a la vista de tu familia y de la mía, y que ellos sean jueces entre nosotros dos.


Los animales destrozados por las fieras, no te los traía, sino que yo mismo los reemplazaba, y tú me exigías lo que había sido robado de noche o de día.


Jacob respondió: 'Tú sabes cómo te he servido, y cómo le fue a tu rebaño conmigo.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម