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Génesis 24:3 - Biblia Católica (Latinoamericana)

3 y júrame por Yavé, Dios del cielo y de la tierra, que no tomarás para mi hijo una mujer de raza cananea, pues vivo en medio de éstos,

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Biblia Reina Valera 1960

3 y te juramentaré por Jehová, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás para mi hijo mujer de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Jura por el Señor, Dios del cielo y de la tierra, que no dejarás que mi hijo se case con una de esas mujeres cananeas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 y te haré jurar por YHVH, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás para mi hijo mujer de las hijas de los cananeos, en medio de los cuales yo habito,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 que voy a obligarte, bajo juramento a Yahveh, Dios del cielo y de la tierra, que no tomarás mujer para mi hijo de entre las hijas de los cananeos, en medio de los cuales yo habito,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 y te haré jurar por Jehová, el Dios del cielo y Dios de la tierra, que no tomarás esposa para mi hijo de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito;

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Génesis 24:3
49 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

La mujer está ligada a su marido mientras éste vive. Pero si se muere queda libre y puede casarse con quien desee, siempre que sea un matrimonio cristiano.


Los reprendí y los maldije; incluso les pegué a algunos, les tiré el pelo y en nombre de Dios les dije severamente: 'No den más sus hijas a los hijos de ellos ni tomen más las hijas de ellos para sus hijos o para ustedes.


Comprendió, pues, que las mujeres cananeas no agradaban a su padre Isaac.


Así hablarán ustedes de ellos: 'Los dioses que no hicieron ni el cielo ni la tierra, desaparecerán de la tierra y de debajo del cielo.


e hizo esta oración: 'Yavé, Dios de Israel, Dios que te sientas sobre los querubines, no hay más Dios que tú en todos los reinos de la tierra; tú hiciste el cielo y la tierra.


y luego casarás a tus hijos con las hijas de ellos y, puesto que se prostituyen ellas por sus dioses, arrastrarán a tus hijos a prostituirse también a sus dioses. -


¡Tú, Yavé, eres el Unico! Tú hiciste los cielos, los cielos de los cielos y todo cuanto contienen, la tierra y todo lo que tiene, los mares y cuanto hay en ellos; tú das la vida a todos, y ante ti se postra el ejército de los cielos.


Yo, pues, te mando un hombre hábil y entendido, a Hiram-Abi,


Pero ya que les he hecho un favor, júrenme por Yavé que también ustedes harán un favor a la casa de mi padre,


A Yavé, tu Dios, temerás, a él servirás, a él seguirás e invocarás su nombre si debes hacer algún juramento.


Temerás a Yavé, tu Dios; a él servirás, e invocarás su nombre si debes hacer algún juramento.


Y el sacerdote proseguirá con la fórmula de maldición: Que Yavé te convierta en maldición y abominación en medio de tu pueblo; que se marchiten tus senos y que se te hinche el vientre.


Cumplan todas estas cosas que les he dicho. No invoquen a dioses extranjeros, ni siquiera los nombren.


No tomes en vano el nombre de Yavé, tu Dios, porque Yavé no dejará sin castigo a aquel que toma su nombre en vano.


Y José hizo jurar a los hijos de Israel, pidiéndoles este favor: 'Cuando Dios los visite, lleven mis huesos de aquí junto con ustedes.


Rebeca dijo a Isaac: 'Estas mujeres hititas me tienen tan aburrida que ya no quiero vivir. Si también Jacob se casa con una mujer de esta tierra, yo me muero.


Por eso júrame ahora mismo ante Dios que no me harás daño, ni a mí, ni a mis hijos, ni a mis descendientes, sino que usarás conmigo y con esta tierra en la que habitas, la misma bondad que yo he usado contigo.


Melquisedec bendijo a Abram, diciendo: 'Abram, bendito seas del Dios Altísimo, Creador del cielo y de la tierra.


En ese entonces había gigantes sobre la tierra, y también los hubo después, cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas de los hombres y tuvieron hijos de ellas. Estos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos.


los hijos de Dios se dieron cuenta de que las hijas de los hombres eran hermosas, y tomaron por esposas aquellas que les gustaron.


Los hombres juran por alguien mayor que ellos, y cuando algo es dudoso, el juramento pone fin a la discusión.


Echaré fuera además a los que se arrodillan en las terrazas para adorar las estrellas; a los que si bien adoran a Yavé, juran al mismo tiempo por Yavé y por Moloc;'


Y si aprenden con cuidado los preceptos de mi pueblo, de tal modo que lleguen a jurar en nombre mío: 'Por vida de Yavé', así como enseñaron a mi pueblo a jurar por Baal, entonces serán establecidos en medio de mi pueblo.


Si juras por la vida de Yavé, con verdad, con derecho y con justicia, entonces tú serás para las naciones una bendición, y serás su gloria.


Todo el que quiera recibir una bendición en el país, la recibirá en el nombre del Dios de la verdad; y cualquiera que preste un juramento en el país, jurará por el Dios que cumple sus promesas, pues todos los males del pasado quedarán en el olvido y ocultos a mis ojos.


Escuchen esto, familia de Jacob, ustedes que llevan el nombre de Israel y que son hijos de su padre Judá. Ustedes que juran por el nombre de Yavé e invocan al Dios de Israel, pero con mala fe y sin sinceridad.


Lo juro por mi Nombre, pues de mi boca sólo sale la verdad y si hablo, la palabra no se echa atrás: 'Ante mí se doblará toda rodilla y toda lengua jurará por mí, diciendo:'


¡Que el Señor los bendiga, el que hizo los cielos y la tierra!


Y de nuevo Jonatán hizo un juramento a David en nombre de su amistad porque lo amaba como a sí mismo.


No jurarán en falso por mi Nombre porque esto sería deshonrar el nombre de tu Dios. ¡Yo soy Yavé!


Si el animal fue robado por descuido del depositario, éste pagará el daño.


Abram le respondió: 'Levanto mi mano hacia Yavé, creador del cielo y de la tierra, el Dios Altísimo,


Pues Yavé, Dios del cielo y de la tierra, que me sacó de la familia de mi padre y del país donde nací, me prometió con juramento que entregaría este país a mis descendientes. Y enviará a su Angel delante de ti, para que traigas de allá una mujer para mi hijo.


Entonces Isaac llamó a su hijo Jacob, lo bendijo y le dio esta orden: 'No te cases con ninguna mujer cananea.


Entonces Israel se inclinó sobre la cabecera de su cama.


Su padre y su madre le dijeron: '¿Acaso no hay suficientes jóvenes en nuestro clan y en todo nuestro pueblo para que vayas a buscarte una entre los incircuncisos, entre los filisteos?' Pero Sansón respondió a su padre 'Consíguemela porque me gusta'.


Den gracias al que es Dios de los cielos, porque su amor perdura para siempre.


Sean nuestros parientes, dennos sus hijas, y tomen las nuestras.


Allí conoció a la hija de un cananeo llamado Sué, a la que tomó por esposa.


David le dijo: '¿Puedes llevarnos donde esos salteadores?' Respondió: 'Si me juras por tu Dios que no me matarás ni me entregarás a mi amo, te llevaré donde esos salteadores'.


Esta fue la respuesta que nos dieron: Nosotros somos los servidores del Dios del cielo y de la tierra, y reconstruimos el Templo que fue edificado hace muchos años; un gran rey de Israel lo edificó y terminó.


Casen a sus hijos y a sus hijas para que se multipliquen y no disminuyan.


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