Gálatas 1:23 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²³ Tan sólo habían oído decir de mí: 'El que en otro tiempo nos perseguía, ahora anuncia la fe que trataba de destruir.

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Biblia Reina Valera 1960

²³ solamente oían decir: Aquel que en otro tiempo nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²³ Todo lo que sabían de mí era lo que la gente decía: «¡El que antes nos perseguía ahora predica la misma fe que trataba de destruir!».

La Biblia Textual 3a Edicion

²³ Sólo oían: Aquél que en un tiempo nos perseguía, ahora proclama la fe° que antes trataba de destruir.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²³ Tan sólo oían decir: 'El que en otro tiempo nos perseguía, ahora anuncia la fe que entonces quería destruir'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²³ solamente habían oído decir: Aquel que antes nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba.

Gálatas 1:23 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Hechos 9:13

Ananías le respondió: 'Señor, he oído a muchos hablar del daño que este hombre ha causado a tus santos en Jerusalén.

Hechos 9:20

y en seguida se fue por las sinagogas proclamando a Jesús como el Hijo de Dios.

Hechos 9:26

Al llegar a Jerusalén intentó juntarse con los discípulos; pero todos le tenían miedo, pues no creían que fuese realmente discípulo.

Hechos 6:7

La Palabra de Dios se difundía; el número de los discípulos en Jerusalén aumentaba considerablemente, e incluso un buen grupo de sacerdotes había aceptado la fe.

Hechos 9:21

Los que lo oían quedaban maravillados y decían: '¡Y pensar que en Jerusalén perseguía a muerte a los que invocaban este Nombre! Pero ¿no ha venido aquí para encadenarlos y llevarlos ante los jefes de los sacerdotes?'

Hechos 19:13

Incluso algunos judíos ambulantes que echaban demonios, trataron de invocar el nombre del Señor Jesús sobre los que tenían espíritus malos, diciendo: 'Yo te ordeno en el nombre de ese Jesús a quien Pablo predica.

Gálatas 6:10

Por consiguiente, mientras tengamos oportunidad, hagamos el bien a todos, y especialmente a los de casa, que son nuestros hermanos en la fe.