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Ezequiel 40:16 - Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Las piezas y los pilares estaban provistos de ventanas con rejillas que daban al interior del pórtico; también las había alrededor del vestíbulo. Los pilares estaba decorados con palmas.

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Biblia Reina Valera 1960

16 Y había ventanas estrechas en las cámaras, y en sus portales por dentro de la puerta alrededor, y asimismo en los corredores; y las ventanas estaban alrededor por dentro; y en cada poste había palmeras.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 En los muros de los cuartos de vigilancia y en sus paredes divisorias había ventanas empotradas que se angostaban hacia adentro. También había ventanas en la antesala y las superficies de las paredes divisorias estaban decoradas con palmeras talladas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 Había ventanas anchas por dentro y angostas por fuera, que daban hacia los aposentos en el interior y alrededor de la puerta. Igualmente, su vestíbulo tenía ventanas alrededor y hacia el interior, y en cada pilar había palmas esculpidas.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 El pórtico tenía todo alrededor saeteras que daban a las habitaciones laterales y a sus jambas; y también el vestíbulo tenía saeteras por dentro todo alrededor. Las jambas estaban decoradas con figuras de palmeras.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 Y había ventanas estrechas en las cámaras, y en sus portales por dentro de la puerta alrededor, y asimismo en los corredores; y las ventanas estaban alrededor por dentro; y en cada poste había palmeras.

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Ezequiel 40:16
29 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Ventanas con rejillas y palmas decoraban los pilares del vestíbulo, las piezas que rodeaban a la Casa y los tejados.


Revistió la sala grande de madera de ciprés y la recubrió de oro fino, haciendo esculpir en ella palmas y cadenillas.


Las ventanas de la Casa estaban guarnecidas de rejas.


allí habían esculpido querubines, palmas y flores, todo recubierto de oro.


ambas puertas de madera de olivo silvestre estaban esculpidas con querubines, palmas y flores; todo estaba recubierto de oro, incluso los querubines y las palmas.


Hizo esculpir en relieve en todas las paredes de la Casa, por todo el derredor, tanto por fuera como por dentro, querubines, palmas y flores.


Después de esto vi un gentío inmenso, imposible de contar, de toda nación y raza, pueblo y lengua, que estaban de pie delante del trono y del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos,


Así también en el momento presente vemos las cosas como en un mal espejo y hay que adivinarlas, pero entonces las veremos cara a cara. Ahora conozco en parte, pero entonces conoceré como soy conocido.


Hay en Jerusalén, cerca de la Puerta de las Ovejas, una piscina llamada en hebreo Betesda. Tiene ésta cinco pórticos,


Las puertas del patio interior se abrían hacia una galería de tres pisos que daban al empedrado del patio exterior.


Estaba formada por querubines y palmas, había una palma entre dos querubines; los querubines tenían dos caras:'


Lo rodeaban vestíbulos de veinte codos de largo y cinco de ancho.


El pórtico, el vestíbulo y las ventanas en derredor eran semejantes, el ancho del pórtico era de cincuenta codos y su profundidad, de veinticinco.


Las piezas medían seis codos a cada lado y frente a cada una había una balaustrada de un codo.


Cada una de las piezas medía una vara de largo y otra de ancho, los pilares que separaban a las piezas tenían cinco codos de espesor.


El justo crecerá como palmera, se alzará como cedro del Líbano.


Desde la fachada del pórtico hasta el fondo del vestíbulo interior, había cincuenta codos.


Se llegaba al vestíbulo por siete peldaños, palmas decoraban los pilares de un extremo al otro.


Sus piezas, sus pilares y su vestíbulo tenían las mismas dimensiones; el pórtico y su vestíbulo tenían ventanas a su alrededor, el largo del pórtico era de cincuenta codos y su ancho de veinticinco.


Su vestíbulo daba al patio exterior, palmas adornaban sus pilares y se llegaba a él por ocho escalones.


Sus piezas, sus pilares y su vestíbulo tenían las mismas dimensiones, el pórtico y su vestíbulo tenían ventanas en su derredor. Su ancho era de cincuenta codos y su profundidad de veinticinco.


Su vestíbulo daba al patio exterior, palmas adornaban sus pilares de un extremo al otro y se llegaba a él por ocho escalones.


La entrada tenía sus piezas, sus pilares, su vestíbulo con ventanas en derredor, su largo era de cincuenta codos y su ancho de veinticinco.


Su vestíbulo daba al patio exterior, palmas adornaban sus pilares de un extremo al otro y se llegaba a él por ocho peldaños.


Luego entró en el santuario y midió el pilar de la entrada, medía dos codos de ancho. La entrada medía seis, y el muro de cada lado, siete.


Encima de las batientes del antesantuario, había representado en los muros querubines y palmas; un tejado de madera protegía la fachada y la puerta exterior.


También había tres filas de cuartos cuyas ventanas se enfrentaban cada tres pasos.


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