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Ezequiel 36:5 - Biblia Católica (Latinoamericana)

5 En el ardor de mi indignación me volveré en contra de Edom y de las demás naciones que invadieron mi tierra con gusto y mucho desprecio, para apropiársela o para saquearla.

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Biblia Reina Valera 1960

5 por eso, así ha dicho Jehová el Señor: He hablado por cierto en el fuego de mi celo contra las demás naciones, y contra todo Edom, que se disputaron mi tierra por heredad con alegría, de todo corazón y con enconamiento de ánimo, para que sus expulsados fuesen presa suya.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Esto dice el Señor Soberano: el enojo de mis celos arde contra esas naciones, especialmente contra Edom, porque me trataron con total desprecio cuando, con aires de triunfo, se apoderaron de mi tierra y la tomaron como botín”.

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La Biblia Textual 3a Edicion

5 Así dice Adonay YHVH: En el fuego de mi celo ciertamente he hablado contra las demás naciones, y contra todo Edom, quien, con toda la alegría de su corazón y el desprecio de alma, se apropió de mi tierra para que sus expatriados fueran presa suya.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Por eso, así dice el Señor Yahveh: 'Sí, hablo en mi ardiente celo contra las demás naciones y contra Edom entero, porque se han apropiado mi país con pleno regocijo de corazón y con desprecio en el alma para depredar sus pastizales'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

5 por eso, así dice el Señor Jehová: He hablado por cierto en el fuego de mi celo contra las demás naciones, y contra toda Idumea, que se adjudicaron mi tierra por heredad con alegría de todo corazón, con enconamiento de ánimo, para arrojarla por presa.

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Ezequiel 36:5
32 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

No te alegres de mi desgracia, oh enemiga mía, pues si he caído, me levantaré; si ahora estoy a oscuras, Yavé será mi luz.


Por eso, profetizarás. Diles de mi parte: Ustedes fueron devastados, pisoteados de todas partes, pasaron a ser propiedad de otras naciones, a costa de ustedes contaron cualquier cosa, los insultaron.


por eso, estoy muy enojado con las naciones orgullosas; pues si bien yo estaba disgustado con Jerusalén, no era para que ellas llegaran a tanto.


En mi celo y en el ardor de mi cólera, lo digo: Sí, ese día será un terremoto para Israel.


voy a mandar a buscar a una nación del norte, dice Yavé, y la echaré contra este país y sus habitantes; los maldeciré y los convertiré para siempre en motivo de espanto, de burla y de vergüenza.


No te olvides, Señor, de los hijos de Edom que, el día en que cayó Jerusalén, decían: '¡Arrásenla, arrásenla hasta los mismos cimientos!'


Sepas que Yavé, tu Dios, es un fuego devorador, un Dios celoso.


Por esto, espérenme, les dice Yavé, para el día en que yo venga a acusarlos. Pues ya salió la sentencia: reuniré a las naciones y juntaré a los imperios para descargar sobre ustedes mi enojo, todo el ardor de mi ira, y todo el país será consumido por el fuego de mis celos.


No te alegres de la ruina de tu hermano en el día de su desgracia. No hagas burla de los hijos de Judá en el día de su angustia, no te rías de su miseria.


¡Regocíjate, alégrate, Hija de Edom, que habitas en el país de Us! También a ti te llegará la copa: te embriagarás y te desnudarás.


¡Ustedes se alegraban y triunfaban, saqueadores de mi propiedad, y relinchaban como potros!


Sobre los hijos de Ammón. Esto dice Yavé: ¿Israel no tiene, acaso, hijos o herederos? ¿Cómo, entonces, Melcom ha heredado el país de Gad y su pueblo se ha establecido en sus ciudades?


El que se burla de los pobres insulta a su Creador; el que se alegra de la desgracia ajena no quedará sin castigo.


de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán y de las tierras de Tiro y de Sidón, muchísima gente venía a verlo con sólo oír todo lo que hacía.


¿Hasta cuándo, Señor, durará tu cólera? ¿Tus celos quemarán siempre como fuego?


Mi cólera se desatará con furor, y cuando se desate mi cólera, experimentarán la indignación que me movía a hablar, a mí, Yavé.


Por eso, profetiza respecto de la tierra de Israel. Esta palabra de Yavé transmitirás a las montañas y a las colinas, a los barrancos y a los valles: Esto fue lo que decidí en mi indignación y cólera. Ya que fueron humillados por las naciones,


Así ha dicho Yavé: 'A todos mis malvados vecinos, que han invadido la propiedad que yo le había regalado a mi pueblo Israel, los voy a arrancar de su suelo. Y a la casa de Judá la arrancaré de en medio de ellos.


Al oírla el ángel me ordenó: 'Anúncialo a viva voz: Esto es lo que dice Yavé de los Ejércitos: Mi amor por Jerusalén y por Sión es tan grande que llega a ser celoso;'


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