Ezequiel 24:27 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁷ Entonces se abrirá tu boca para hablarle al escapado, ya no estarás más mudo. Serás para ellos una señal y sabrán que yo soy Yavé.

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Biblia Reina Valera 1960

²⁷ En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el fugitivo, y hablarás, y no estarás más mudo; y les serás por señal, y sabrán que yo soy Jehová.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁷ Cuando llegue, enseguida recuperarás la voz para que hables con él y serás un símbolo para los de este pueblo. Entonces ellos sabrán que yo soy el Señor».

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁷ En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el fugitivo, y hablarás y no estarás más mudo y les serás por señal, y sabrán que Yo soy YHVH.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁷ Ese día se te abrirá la boca para hablar con el fugitivo; hablarás y ya no volverás a estar mudo. Así serás para ellos un símbolo, y sabrán que yo soy Yahveh.'

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁷ En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el que haya escapado, y hablarás, y no estarás más mudo; y les serás por señal, y sabrán que yo soy Jehová.

Ezequiel 24:27 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Ezequiel 33:22

Ahora bien, la mano de Yavé había estado sobre mí desde la tarde antes que llegara el fugitivo, y a la mañana siguiente, cuando llegó a mi casa el hombre, Yavé me abrió la boca: ¡ya no estaba mudo!

Ezequiel 29:21

En ese día yo levantaré la nación de Israel. Yo te concederé hablar libremente en medio de ellos y conocerán que yo soy Yavé.

Efesios 6:19

Rueguen también por mí, para que, al hablar, se me den palabras y no me falte el coraje para dar a conocer el misterio del Evangelio

Lucas 21:15

Pues yo mismo les daré palabras y sabiduría, y ninguno de sus opositores podrá resistir ni contradecirles.

Salmos 51:15

Mostraré tu camino a los que pecan, a ti se volverán los descarriados.

Ezequiel 25:1

Se me comunicó esta palabra de Yavé:

Daniel 10:15

Ante esas palabras incliné hacia el suelo la cabeza y me quedé sin palabras.

Ezequiel 4:3

Después tomarás una sartén de hierro que pondrás cual muralla de hierro entre ti y la ciudad, y te quedarás vigilándolas; tú le pondrás sitio y quedará sitiada. Esta será una señal para la casa de Israel.