Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Ezequiel 16:11 - Biblia Católica (Latinoamericana)

11 te adorné con joyas, puse brazaletes en tus muñecas, un collar en tu cuello,

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

11 Te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus brazos y collar a tu cuello.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

11 Te di joyas preciosas, pulseras y hermosos collares,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

11 También te engalané con adornos, y puse brazaletes en tu brazo y gargantilla en tu cuello.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Te adorné con joyas, puse brazaletes en tus brazos y un collar en tu cuello.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

11 Y te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus manos, y un collar en tu cuello.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Ezequiel 16:11
31 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Cuando acabaron de beber los camellos, él sacó un anillo de oro de seis gramos y se lo puso a la joven en las narices. Luego tomó para sus brazos dos brazaletes de oro de unos sesenta gramos.


velos, sombreros, cadenillas de pie, cinturones, frascos de perfume y amuletos,


Y quitándose el anillo de su dedo, lo puso en el dedo de José; lo hizo vestir con ropas de lino fino y le puso un collar de oro en el cuello.


En seguida le pregunté: '¿De quién eres hija?' Me respondió: 'Soy hija de Batuel, el hijo de Najor y de Milcá. Entonces le puse el anillo en su nariz y los brazaletes en sus brazos,


Son para ti una hermosa corona para tu cabeza, un collar para tu cuello.


Se oía el ruido como de una muchedumbre enfiestada a la que se habían juntado hombres venidos del desierto; éstos colocaban brazaletes en las manos de las mujeres y espléndidas coronas en sus cabezas.


Por eso venimos a ofrecer a Yavé lo que cada uno de nosotros ha encontrado, en objetos de oro, brazaletes, cadenitas, anillos y collares para hacer expiación por nosotros delante de Yavé.


los veinticuatro ancianos se arrodillan ante el que está sentado en el trono, adoran al que vive por los siglos de los siglos y arrojan sus coronas delante del trono diciendo:


Veinticuatro sillones rodean el trono, y en ellos están sentados veinticuatro ancianos con vestiduras blancas y coronas de oro en la cabeza.


No tengas miedo por lo que vas a padecer. El diablo meterá a algunos de ustedes en la cárcel para ponerlos a prueba. Serán diez días de prueba. Permanece fiel hasta la muerte y te daré la corona de la vida.


Yo pondré fin a sus diversiones, a sus fiestas, lunas nuevas y sábados, a todas sus solemnidades.


Entonces Belsasar ordenó que se revistiera de púrpura a Daniel, que le pusieran al cuello un collar de oro y que se proclamara que de ahora en adelante era el tercer personaje de su reino.


Después me dijeron que tú puedes interpretar y resolver los problemas. Si puedes leer lo que allí está escrito y darme a conocer su significado, serás revestido de púrpura, llevarás un collar de oro al cuello y serás la tercera persona del reino'.


Gritó con fuerte voz para que llamaran a los magos, los brujos y los astrólogos, y ante los sabios de Babilonia el rey tomó la palabra: 'El hombre que lea lo que ahí está escrito y que me dé a conocer su significado será revestido de púrpura, se le pondrá un collar de oro al cuello y ocupará el tercer puesto en mi reino'.


Mandaste venir hombres de tierras lejanas, les enviaste mensajeros y éstos vinieron. Para ellos te bañaste, te maquillaste los ojos y te pusiste tus joyas.


Cayó la corona de nuestra cabeza. ¡Pobres de nosotros, que pecamos!


Ese día, Yavé de los Ejércitos será para los que quedan de su pueblo espléndido adorno y joya magnífica.


vestidos preciosos, mantos, chales y bolsos,


Me robaste el corazón, hermana mía, novia mía, me robaste el corazón con una sola mirada tuya, con una sola de las perlas de tu collar.


Tus mejillas se ven lindas con esos aros y tu cuello entre los collares.


anillo de oro en un collar de zafiro, así es una sabia reprimenda para el que puede oírla.


Pondrá en tu cabeza una magnífica diadema, te regalará una corona de gloria'.


Este vio volver a él a todos sus hermanos y hermanas, lo mismo que a los conocidos de antes. Comían con él en su casa lo compadecían y consolaban por todos los males que Yavé le había mandado. Cada uno de ellos le regaló una moneda de plata y un anillo de oro.


El rey la prefirió a todas las demás; se ganó su afecto y su cariño más que cualquier otra joven. Puso en su cabeza la corona real y la escogió como reina en vez de Vasti.


Gedeón añadió: 'Lo único que les pido es que cada uno de ustedes me dé un anillo de su botín (los vencidos eran Ismaelitas y tenían anillos de oro)'.


Le colocó también el turbante en la cabeza, y puso en su parte delantera la lámina de oro: ésta era la corona de santidad que Yavé había mandado a Moisés.


Venían hombres y mujeres: todos los de corazón generoso traían joyas, aros, anillos, collares y toda clase de objetos de oro, el oro que cada uno presentaba como ofrenda a Yavé.


Aarón les contestó: 'Saquen los aros de oro que sus mujeres, y sus hijos e hijas llevan en sus orejas, y tráiganmelos.


Entregaron a Jacob todos los dioses extraños que tenían consigo, así como los aros de las orejas, y Jacob los enterró bajo una encina que hay junto a Siquem;'


Luego sacó joyas de oro y plata, y también vestidos, y se los dio a Rebeca. Hizo también valiosos regalos a su hermano y a su madre.


Tomaste tus joyas de oro y plata que te había dado, hiciste con ellas estatuas de machos con los que te prostituiste.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម