Ezequiel 12:16 - Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ Perdonaré sin embargo a algunos de ellos, los que escaparán a la espada, al hambre y a la peste; entonces podrán confesar en medio de las naciones adonde vayan todos los horrores que cometieron; y así sabrán que yo soy Yavé.

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ Y haré que unos pocos de ellos escapen de la espada, del hambre y de la peste, para que cuenten todas sus abominaciones entre las naciones adonde llegaren; y sabrán que yo soy Jehová.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ No obstante, a algunos los libraré de morir en la guerra o por enfermedades o de hambre, para que confiesen sus pecados detestables a sus captores. ¡Entonces sabrán que yo soy el Señor!».

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ Pero haré que unos pocos de ellos escapen de la espada, del hambre y de la peste, para que cuenten todas sus abominaciones en medio de las naciones adonde van, y sabrán que Yo soy YHVH.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ Pero preservaré de la espada, del hambre y de la peste a un pequeño número de entre ellos, para que cuenten todas sus abominaciones en las naciones adonde vayan, y sepan que yo soy Yahveh''.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁶ Y haré que de ellos queden pocos en número, de la espada, y del hambre, y de la pestilencia, para que cuenten todas sus abominaciones entre las naciones adonde llegaren; y sabrán que yo soy Jehová.

Ezequiel 12:16 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Jeremías 4:27

Pues bien, así habla Yavé: 'Todo el país será destruido, pero no les daré el golpe de gracia.

Isaías 1:9

¡Menos mal que Yavé de los Ejércitos no ha dejado un resto! Pues por poco nos parecemos a Sodoma y somos igual que Gomorra.

Romanos 9:27

Respecto a Israel, Isaías dice sin vacilar: Aunque los hijos de Israel fueran tan numerosos como la arena del mar, sólo un resto se salvará.

Mateo 24:22

Y si ese tiempo no fuera acortado, nadie saldría con vida. Pero Dios lo acortará en consideración a sus elegidos.

Mateo 7:14

Pero ¡qué angosta es la puerta y qué escabroso el camino que conduce a la salvación! y qué pocos son los que lo encuentran.

Ezequiel 36:31

Entonces se acordarán de su conducta y de sus malas acciones, se avergonzarán de ustedes mismos debido a sus culpas y a sus crímenes.

Jeremías 30:11

Yo estoy contigo para salvarte. Reduciré a la nada a todas las naciones por donde te disperse; pero a ti no te aniquilaré, sino que te corregiré como es debido, ya que no te dejaré sin castigo.

Isaías 24:13

Estos quedan en la tierra, allí donde estaban los pueblos, como las aceitunas después de apalear al olivo o como los pampanitos después de la vendimia.

Isaías 10:22

Porque aunque fuera tu pueblo, oh Israel, como la arena del mar, sólo un resto volverá. Su destrucción está decidida, para que quede bien en claro la justicia;'

Isaías 10:19

Lo que quede de sus árboles será tan poco, que un niño los podrá contar.

Isaías 6:13

Y si quedara solamente la décima parte, también habría de ser entregada al fuego, como hacen con la raíz de la encina y del roble. De la raíz, sin embargo, brotará una raza santa.

Génesis 13:16

Multiplicaré tu descendencia como el polvo de la tierra, de tal manera, que si se pudiera contar el polvo de la tierra, también se podría contar tu descendencia.

Ezequiel 7:15

La espada aguarda al que sale afuera. El que está en el campo morirá a espada, el que está en la ciudad será presa del hambre y de la peste.

Ezequiel 12:15

Cuando los haya desparramado por entre las naciones, o dispersado en medio de los países, sabrán que yo soy Yavé,.

Ezequiel 12:17

Yavé me dirigió nuevamente la palabra:

Ezequiel 14:21

Esto dice el Señor: He enviado en contra de Jerusalén a mis cuatro terribles castigos: la espada, el hambre, las fieras feroces y la peste, porque quiero acabar con hombres y animales.

Ezequiel 36:20

Y así llegaron a las naciones. Pero allí también fue profanado mi nombre. En efecto se decía: 'Este es el pueblo de Yavé que tuvo que salir de su país.

Salmos 59:12

No hay palabra de sus labios que en su boca no sea pecado. Quedarán atrapados en su orgullo, en los insultos y mentiras que pronuncian.