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Efesios 1:23 - Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Ella es su cuerpo y en ella despliega su plenitud el que lo llena todo en todos.

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Biblia Reina Valera 1960

23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

23 Y la iglesia es el cuerpo de Cristo; él la completa y la llena, y también es quien da plenitud a todas las cosas en todas partes con su presencia.

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La Biblia Textual 3a Edicion

23 la cual es su cuerpo,° la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 que es su cuerpo, la plenitud del que lo llena todo en todo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquél que todo lo llena en todo.

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Efesios 1:23
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

De su plenitud hemos recibido todos, y cada don amoroso preparaba otro.


Así prepara a los suyos para las obras del ministerio en vista de la construcción del cuerpo de Cristo;'


en una palabra, que conozcan este amor de Cristo que supera todo conocimiento. En fin, que queden colmados hasta recibir toda la plenitud de Dios.


El mismo que bajó, subió después por encima de todos los cielos para llenarlo todo.


Y cuando el universo le quede sometido, el Hijo se someterá a Aquel que le sometió todas las cosas, para que en adelante Dios sea todo en todos.


Ahora me alegro cuando tengo que sufrir por ustedes, pues así completo en mi carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo para bien de su cuerpo, que es la Iglesia.


Así la paz de Cristo reinará en sus corazones, pues para esto fueron llamados y reunidos. Finalmente, sean agradecidos.


Ahí no se hace distinción entre judío y griego, pueblo circuncidado y pueblo pagano; ya no hay extranjero, bárbaro, esclavo u hombre libre, sino que Cristo es todo en todos.


Destruyó el odio en la cruz y, habiendo reunido a los dos pueblos, los reconcilió con Dios por medio de la misma cruz.


Hay diversidad de obras, pero es el mismo Dios quien obra todo en todos.


Así, pues, hay que obedecer, pero no solamente por miedo al castigo, sino por deber de conciencia.


Un solo cuerpo y un mismo espíritu, pues ustedes han sido llamados a una misma vocación y una misma esperanza.


En adelante los poderes y autoridades del mundo de arriba podrán descubrir, mirando a la Iglesia, los más diversos aspectos de la sabiduría de Dios,


hasta que todos alcancemos la unidad en la fe y el conocimiento del Hijo de Dios y lleguemos a ser el Hombre perfecto, con esa madurez que no es menos que la plenitud de Cristo.


en vez de mantenerse en contacto estrecho con aquel que es la cabeza. El mantiene la unidad del cuerpo entero por un conjunto de nervios y ligamentos y le da firmeza haciéndolo crecer según Dios.


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